El espacio Pous Cultura, situado en la calle Pujol de Mataró, acoge, hasta el 9 de diciembre, la muestra de fotografías de Marco Pons.
La afición de Pons por la fotografía empezó con su padre, pues era arquitecto y fotógrafo y gracias a él descubrió que la belleza se esconde en los pequeños detalles. Marc confiesa que de tantos años que hace que se dedica, su afición se ha transformado en profesión. Principalmente retrata motivos arquitectónicos pues explica que es un campo de trabajo minoritario y esto le permite ampliar la visión arquitectónica y reivindicar el trabajo de miles de artesanos anónimos.
Prefiere el formato analógico al digital, el hecho de revelar la película es y será superior en calidad que cualquier tipo de formato digital. También pero usa el formato digital por las múltiples ventajas que le proporciona. Lo entusiasma el blanco y negro puesto que, según el artista, transgredeix la realidad coloreada para crear nuevos conceptos estéticos. Lo compara con el cine clásico, otra de sus grandes pasiones, pues el blanco y negro proporciona un aliciente especial que hace más atractivos los films.
Asociado a la Federació Catalana de Fotografia, ha participado en varios concursos de fotografía y se ha llevado algún premio, a pesar de que en tono irónico dice que su tipo de imagen "no es carne de concurso". Ha expuesto en alguna pequeña galería de arte, a diferentes espacios Municipales de Barcelona, bares, locales y hoteles.
Para él la fotografía representa un medio con el cual se expresa, y le permite disfrutar de las cosas guapas que hay en el mundo. Según Pons, hay muchas cosas que se ven mejor a través de la fotografía que de la realidad. Ahora mismo su trabajo se concentra al "pintar" fotografías en blanco y negro, colorea digitalmente las imágenes creando nuevas realidades o irrealitats para estimular la imaginación del espectador.
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