Los responsables del Centre Natación Mataró se han mostrado absolutamente consternados por la muerte de Beto Fernàndez, hombre clave de la entidad y del waterpolo mataroní, que murió este fin de semana a la edad de 46 años. Fernàndez fue entrenador del equipo masculino y director técnico de la entidad, consiguiendo los mejores resultados de su historia. Su pérdida ha dejado el club, y el mundo del deporte mataroní, en estado de shock.
"El CN Mataró está de luto", afirma la entidad en un comunicado hecho público este lunes, que define Fernàndez cómo "un hombre de club de toda la vida y que desde bien joven había formado parte de la entidad". El club señala que es "un hecho muy duro de entomar", puesto que supone "un golpe terrible no solo para el Centro, sino para toda la familia del waterpolo y para toda aquella gente que siendo otros deportes, habían podido disfrutar de su conocimiento; alumnos, jugadores, entrenadores, directivos de muchos clubes y de varios deportes".
La entidad mataronina asegura que Fernàndez les ha dejado "una huella imborrable", y recuerdan que empezó de muy joven al CN Mataró primero como nadador y después como jugador, entrenador de categorías, entrenador del primer equipo femenino de waterpolo y entrenador del primer equipo de waterpolo masculino. Durante estos años consiguió los hitos deportivos de más alto nivel, cómo son el subcampeonato de la copa del rey, 3.º lugar a la liga estatal, y llegar a los cuartos de final de la Euroliga en dos ocasiones. A banda, compaginó la tarea de entrenador con la de director técnico, estructurando todo el organigrama del waterpolo del Centro.
El CN Mataró define Fernàndez cómo "un estudioso" del Waterpolo, con gran voluntad divulgativa, que lo llevó incluso a escribir un libro, 'MTA y Waterpolo, modelo técnico de aprendizaje", donde presentaba una cuidadosa metodología de entrenamiento para la mejora técnica de los jugadores/se de waterpolo.
A banda, destacan su gran calidad humana, algo que también ha hecho todo el mundo quien lo conoció y tratar. "Era amigo muy conocido y estimado por todo el mundo, con quien siempre se podía hablar y siempre estaba abierto a ayudar en el que hiciera falta. Una persona muy próxima", aseguran.
Comentarios (5)