El Juventud Balonmano Mataró perdió de manera clara en su visita en el Sarriá. Los amarillo y negros eran conscientes de la dificultad del enfrentamiento ante un equipo llevar de la primera estatal y que además a casa suya acostumbra a ser mucho más efectivo. Dedo y hecho, los mataronins perdieron sin contemplaciones por un claro 35-23. Bernat Muñoz, con 9 goles, no fue suficiente para parar el rival mataroní.
El partido se complicó en los primeros diez minutos, cuando los locales clavaron un parcial de 6-1 que abría agujero sólo empezar. La cosa no mejoró y a pesar de que los mataronins consiguieron recortar gracias a un parcial de 2-5, al descanso perdían por 15-10.
A la reanudación la diferencia se fue ensanchando debido en momentos de bloqueo ofensivo evidentes (del 45' al 50', parcial en contra de 4-0) que dejaban sin ningún tipo de opción a los de la capital del Maresme. Finalmente, se perdió de doce: 35-23.
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