El CE Mataró confecciona l’equipo por la próxima temporada

El CE Mataró trabaja, en silencio, de cara a preparar la próxima temporada. El equipo, que después de dos descensos consecutivos se encuentra en la Preferente Territorial, está confeccionando la plantilla con la que jugará durante este nuevo curso. Pep Barbany, entrenador amarillo-y-negro que acabó la temporada anterior y que iniciará, desde el principio, este nuevo proyecto, afirma que "es complicado" contactar con algunos jugadores, puesto que la crisis de los últimos años frena además de un cuando se le presenta la posibilidad de fichar por el conjunto de la capital del Maresme. "Muchos conocen al equipo deportivo que hay al última, pero preguntan bastante como está ahora mismo todo ello", admite Barbany. Esto no ha impedido que nombres como el suyo o el de Jordi Pino a la dirección deportiva de la base creen ilusión entre gente que haya sido vinculada al CE Mataró. El último gran regreso ha sido lo de Pablo Pérez, centrocampista ofensivo y cerebro del equipo que subió a División de Honor juvenil (con Barbany y Pino como entrenadores). Llega procedente del Vilassar de Dalt.

El regreso de este jugador, que salió escopetejat del club después de problemas con el ex-presidente, Paco Gonzalo, se une al de Rubén Castillo, pívot defensivo que también estuvo a las órdenes del actual entrenador durante su etapa juvenil. De hecho, el equipo intenta recuperar una generación dorada que entre entrenadores y junta directiva se dejó perder. Algunos, como Àlex Cañadilla (goleador de aquella época) apuntan más alto, puesto que ha firmado por el Gavà de Segunda B. Barbany ha confirmado también la incorporación de Pepe Almeda, del Olímpico de la Garriga. El centro del campo, uno de los puntos débiles del equipo el año pasado, se está reforzando de lo lindo. Esto se suma a las renovaciones de algunas jóvenes prometidas que ya estaban al equipo, a pesar de que el técnico no ha concretado qué han firmado ya.

El equipo empezará los entrenamientos el día 16 de agosto, unas cuatro semanas antes del inicio de competición, según ha calculado Pep Barbany. Los mataronins ya tienen previstos 7 amistosos con conjuntos de Preferente Territorial y de Primera y Segunda regional. No hay objetivos previstos, a pesar de que a nadie se le escapa que el ascenso –la categoría es más accesible a nivel de plazas que en los últimos años- parece una obligación por el primer equipo de una ciudad de más de 120.000 habitantes.