El CE Mataró tiene hasta viernes para pagar en Creixell

El CE Mataró tiene cinco días para intentar cambiar una situación que parece condenada al desastre. La deuda con Jaume Creixell, que asciende a los 27.600 euros, tiene bloqueado cualquier tipo de movimiento del primer equipo. No se pueden dar altas de jugadores ni del entrenador hasta que no se solucione la denuncia del Tigre de Sants. El entrenador, pero, ha hecho un último gesto por la que ha sido su "segunda casa", como en múltiples ocasiones ha asegurado, y en las negociaciones con el presidente saliente que ya no es presidente, Paco Gonzalo, y el presidente entrante que encara no lo es, Lluís Sardà, los ha asegurado que si cobra el 50% del que le deben de, 13.800 euros, retiraría la demanda y se desencallaría la situación.

La Federación Catalalana de Fútbol ha explicado a capgros.com que antes de proceder al descenso de la categoría, el CE Mataró tiene tiempo para pagar el que debe de y dar de alta las fichas de la primera plantilla hasta el viernes, día 4 de septiembre. Este sería el último día laborable antes del inicio de competición y la fecha tope porque el club abonara la deuda que tiene con Jaume Creixell. De momento, y a falta de jefas visibles, la entidad mataronina sigue funcionando gracias a la estructura montada por Salvador Sagrera y a la ayuda de tres personas, dos de ellas ex-directivos, que siguen al pie del cañón como centinelas en una ciudad destruida. Abren el campo, están a taquilla si hay día de partido, encienden las luces, el riego y el que haga falta mientras siga presente el vacío de poder que hay actualmente.

Eulogio Carmona sigue a la espera de los acontecimientos. El ex-candidato a la presidencia ha matizado su proyecto, explicando que no se trata de un cambio de nombre del club si no empezar de cero con un club nuevo, puesto que es un gran sacrificio pero la única vía posible para dejar atrás unas deudas de "650.000 euros". A pesar de esto, y a pesar de no tener obligación, su "prometida personal" es la de ir pagando mica en mica a trabajadores y todos los que menos recursos económicos tenían y siguen prestando servicio en el Mataró. Además, su aspiración sería poder comprar una plaza en una categoría como preferente territorial como mínimo, a pesar de que cree que el año de este año será de total sacrificio. Faltará, también, lidiar con la Federación para poder acceder en alguna plaza de estas características.