El partido empezaba con una buena dinámica de los mataronins, que hicieron un parcial de 2-8 que dejaba buenas sensaciones. Los locales se rehicieron con un tiempo muerto que los permitió reaccionar, y en un santiamén cambiaron el marcador y se llevaron el primer cuarto por 17-13. En el segundo, los dos equipos estuvieron muy acertados de cara a cesta y del reparto de golpes surgió un 40-34 al descanso que lo dejaba todo abierto.
Fue al inicio del tercer periodo cuando los mataronins se deshincharon mica en mica, sin creer realmente en la remontada ante un rival que se escapó en cuatro puntos en el tercer periodo. La distancia al empezar el último cuarto, construida mica en mica, se hizo demasiado grande por los mataronins, que no estuvieron al nivel exigido todo y una tímida reacción y se soltaron en el último cuarto hasta perder por un contundente 83-62.
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