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El restaurando Sésamo Negro de Mataró. Foto: R.Gallofré

Salva Fernàndez

Los restaurantes mataronins vuelven a su nueva normalidad

Los establecimientos de la ciudad ya empiezan a atender comensales a las mesas de interior, pero con aforos encara muy limitados y con bastantes incertidumbres

Los restaurantes de Mataró vuelven a su nueva normalidad, aquella que se los permite la fase 2 estrenada esta semana. Desde lunes, los establecimientos pueden abrir de nuevo las puertas para ofrecer la mitad de su aforo bajo muchas medidas de seguridad, una situación que no es la más deseada pero que es un primer paso. Los permite ir más allá que ofrecer tan sólo servicio a las terrazas, en caso de que tengan.

"Empezamos martes, y es una semana complicada por la lluvia, pero la gente que ha venido está contenta", explica Pere Patuel, de La Marineta. En su caso han intentado hacer dos turnos y ampliar también con la apertura los domingos: "cuesta explicar a los clientes la necesidad de establecer turnos, pero los necesitamos para poder compensar gastos, del mismo modo que ahora los domingos abrimos para poder hacer más ingresos mientras haya restricción de aforo". En su caso han separado las mesas, comprado dispensadors y plastificado las cartas para poderlas desinfectar fácilmente y mantienen el servicio de comer para llevar que estrenaron hace un par de semanas como una nueva vía de negocios.

Una situación similar tienen al Sésamo Negro, donde Àlex Galvao relata que "se nota que todavía hay respeto por el que ha pasado y que la gente está tocada económicamente; prefieren las terrazas que un restaurante interior". Galvao añade que "de momento, de 0 a 10 estamos trabajando 5 por estos factores, no hay bastante trabajo para llenar el 50%, esperamos que vaya mejorando". En su caso, el servicio de Sésamo Expreso a domicilio está aguantando el tipo, puesto que "la gente hace pedidos y los sale más económico porque los postres y bebida ya la tienes en casa". "Sort de esto", constata.

"El aforo es demasiado limitado"

En el caso del restaurante Dos Cocineros, también encuentran que en Fase2 "el aforo es demasiado limitado". "La gente que ha venido lo ha hecho con ganas, y se sienten seguros por las medidas de seguridad que hemos tomado, pero todavía estamos devolviendo a la normalidad", relata. Esperan ver "como funciona el fin de semana" para poder equilibrar "la complejidad de abrir a medias, recuperar gente del ERTO y todo con normativa que cambia de un día por el otro". Han abierto un servicio para llevar comer, menú y carta, que también los está ayudando en estos tiempos.