
La atención primaria tampoco escapa a la falta de pediatras
En muchos CAP del país, incluidos los de Mataró, médicos de familia acaban atendiendo los niños por falta de profesionales especializados
La situación de la Pediatría en hospitales como el de Mataró es complicada, con la crisis vivida este verano que estuvo a punto de hacer colapsar el servicio por falta de médicos, pero que ahora está en vías de solución. Sin embargo, la atención primaria también es grave. Según la pediatra Anna Roca, del sindicato Médicos de Cataluña, más del 35% de las plazas de pediatría en los CAP no están cubiertas por médicos que sean pediatras especializados. Esto provoca que muchos niños sean atendidos por médicos generalistas que no han recibido formación específica en pediatría. "Dependiendo del CAP, de seis plazas de pediatría, quizás solo una o dos están ocupadas por pediatras", asegura la doctora. En otros casos, se trata de doctores que han cursado la especialidad en otros países y que están pendientes de homologar el título. "En algunos casos quizás nunca podrán hacerlo porque no se les permitirá", constata Roca, lo que no impide que sigan ejerciendo en el ámbito y atendiendo a los niños del país.
"Tenemos un pediatra de baja y es casi imposible cubrir la plaza", lamentan desde un CAP de Mataró
Roca es clara al señalar que una de las principales soluciones a esta crisis es la flexibilización del sistema público, tanto en cuanto a horarios como a condiciones laborales, algo que permitiría atraer a más doctores a este ámbito. "Es un sistema muy rígido. Si flexibilizáramos las condiciones, podríamos retener a más profesionales y garantizar una mejor atención a nuestros niños", afirma. Una de las críticas más duras que hace la doctora es hacia las estructuras directivas del sistema sanitario, que considera "poco dispuestas" a adaptarse a las necesidades de los profesionales.
Los CAP de Mataró no escapan a esta situación. Ester Fabre, médico de familia del CAP Mataró Centro, uno de los tres que dependen del Consorcio Sanitario del Maresme, explica que uno de los problemas principales que sufren es la falta de pediatras y la sobrecarga de trabajo que esto conlleva. La situación es especialmente complicada para cubrir bajas médicas. "Tenemos un pediatra de baja y es casi imposible cubrirla, así que vamos al 50%", explica Fabre, representante del comité de trabajadores por el sindicato CATAC. Además, la crisis de personal en el Hospital de Mataró ha forzado a los pediatras de primaria vinculados al Consorcio a participar en la cobertura de la atención hospitalaria. "Están en la rueda de tener que cubrir la situación irregular del hospital mientras siguen en el CAP", señala Fabre, añadiendo todavía más carga de trabajo.

Fabre advierte que la situación podría empeorar cuando comience la temporada alta de enfermedades infantiles: "Nos vienen bronquiolitis, gastroenteritis, resfriados... Si no lo arreglan antes, tendremos problemas". Con un pediatra menos en el CAP, los médicos de familia pueden verse forzados a asumir más urgencias pediátricas, una situación que, de hecho, en el CAP de Mataró Centro, ya se da los sábados. La doctora cree que la solución no pasa por mejoras retributivas, sino por condiciones. Los profesionales de la pediatría, afirma, buscan evitar la presión de las guardias y el exceso de trabajo, que se acentúa en épocas de máxima demanda, como el invierno. "Todo el mundo tiene familia y todo el mundo tiene vida, y si un pediatra puede elegir entre un lugar donde no le pidan hacer guardias y otro donde sí, optará por el primero. No es un tema retributivo; si en tu lugar de trabajo tienes refuerzo, recursos adecuados y buenas condiciones, te quedas", constata.
Cada vez más población opta por las mutuas ante los problemas que sufre la sanidad pública
En los CAP son testigos, y víctimas, de la pérdida de popularidad de especialidades como pediatría o médico de familia entre los estudiantes de medicina. Se trata de áreas, como señala la doctora del CAP Mataró Centro, donde hay "más sobrecarga de trabajo" fruto de la falta de recursos, en especial en los meses de otoño e invierno con los picos de virus respiratorios, y esto hace que los futuros médicos las descarten como opción profesional. "Las nuevas generaciones priorizan más la calidad de vida", concluye Fabre.
Nueva organización y pérdida de continuidad en la atención
En el contexto de esta crisis, desde el Departamento de Salud se ha propuesto una nueva organización de la pediatría en la atención primaria en Cataluña, con la centralización de los servicios en CAP o centros sanitarios determinados. Esto, según Ester Fabre, del CAP Mataró Centro, puede afectar la continuidad en la atención sanitaria. “Si perdemos la proximidad, también perdemos la continuidad en la atención, y eso es importante tanto para los profesionales como para las familias”, explica. Fabre es crítica con este enfoque: “Nosotros somos un mundo aparte en todo, y para los que somos de primaria, nos gusta que estemos todos allí, que estemos en contacto. El médico de familia ve al padre, el pediatra ve a los hijos, y podemos hacer un trabajo en equipo”.

Manifestación contra los recortes a la sanidad, en 2023 a Mataró
Enfermeras sobrecargadas y demoras en el servicio
Desde la Coordinadora en Defensa de la Sanidad Pública en Mataró y el Maresme también señalan las disfunciones que se viven en la atención primaria debido a la falta de especialistas. “En los CAP de Mataró vemos cómo en pediatría aumenta la atención de demanda aguda por parte de enfermería, que asume cada vez más carga”, explica M. Carme Carrion, miembro de la Coordinadora. Carrion también considera preocupante que “cada vez más médicos de familia tengan que hacer visitas a pacientes pediátricos” y que las agendas de los centros de atención primaria estén cada vez más colapsadas. “Se están produciendo demoras, y cada vez más familias prefieren ir directamente al Hospital, lo que contribuye a congestionarlo aún más”, concluye. Todo esto, según Carrion, está provocando un aumento de la población que opta por las mutuas para la atención de sus hijos e hijas.