El último trimestre del año es, tradicionalmente, el momento clave para renovar o cambiar de seguro de salud, una decisión que cada vez toman más personas a Cataluña. Con un crecimiento constante en la última década, más de la mitad de los catalanes ya optan por una póliza privada. Esta tendencia, que también se ve a Madrid, responde a varias razones que van desde la saturación del sistema público hasta las ofertas cada vez más atractivas de las compañías de seguros.

Según datos recientes, el número de personas aseguradas ha crecido un 47% en los últimos veinte años en España, pasando de ocho millones de personas en 2003 a doce millones hoy en día. En Cataluña, actualmente un 34% de la población ya tiene un seguro privado, y la cifra continúa en aumento. La razón principal de este crecimiento es la saturación del sistema público de salud, que sufre largas listas de espera y una atención cada vez más colapsada. Muchos ciudadanos encuentran en los seguros privados una solución para evitar esperas por visitas o intervenciones quirúrgicas, especialmente aquellos con problemas de salud que requieren tratamientos rápidos o seguimientos periódicos.
El caso de las intervenciones quirúrgicas ilustra claramente este cambio: ya más del 58% de estas se hacen en hospitales privados, y un 55% de los partos se realizan también en centros de salud privados. Este incremento refleja la confianza creciente de la ciudadanía en la sanidad privada.
El final del año es el momento en que las aseguradoras de salud presentan sus ofertas más atractivas, y también es cuando muchas personas revisan sus necesidades médicas y valoran si su seguro actual les ofrece la cobertura adecuada. Además, en este periodo muchas compañías permiten cambiar de póliza sin penalizaciones, ofreciendo condiciones especiales para captar nuevos clientes.
Las ventajas de un seguro privado son múltiples y van más allá del ahorro de tiempo:
- Flexibilidad y personalización: Los usuarios pueden elegir los profesionales y centros sanitarios que más los convengan, ofreciendo una mayor libertad en la atención médica.
- Rapidez en la atención: A pesar de que algunas mutuas low-coste pueden sufrir retrasos, el sector privado ofrece, en general, una gestión más eficiente y personalizada de las visitas e intervenciones. Esto es especialmente importante en casos donde el tiempo es un factor crítico.
- Amplitud de servicios: A diferencia de la sanidad pública, muchos seguros privados incluyen servicios complementarios como tratamientos dentales, especialidades médicas, revisiones anuales y otras opciones que pueden ser difíciles de conseguir en el sistema público.
- Atención preventiva: La sanidad privada fomenta la prevención mediante revisiones periódicas, analíticas y controles constantes, cosa que puede ayudar a detectar problemas de salud antes de que se hagan más graves.
El momento de las ofertas
Cada año, al final del cuarto trimestre, las aseguradoras ajustan sus precios y lanzan nuevas promociones para atraer nuevos clientes. Este es el mejor momento para revisar las condiciones de tu seguro y valorar si un cambio puede ser beneficioso. En este contexto, grandes grupos aseguradores como Adeslas, Sanitas o Asisa, que ya concentran más del 57% del mercado, ofrecen pólizas ajustadas a todas las necesidades, con opciones desde coberturas básicas hasta planes más completos que incluyen tratamientos avanzados.
Este periodo de renovación también es clave para ajustar la póliza a las necesidades cambiantes. Por ejemplo, las personas entre 41 y 50 años, que son el grupo de edad con más asegurados, a menudo optan por coberturas más amplias que incluyan prevención, seguimientos específicos y tratamientos especializados para problemas comunes de salud a esta edad.
El crecimiento continuado de la sanidad privada no es una moda pasajera. Los expertos del sector prevén que esta tendencia seguirá en aumento, especialmente mientras haya un contexto de crecimiento económico y una sanidad pública que sigue afrontando grandes desafíos. En un escenario donde las listas de espera se alargan y los recursos públicos son limitados, cada vez más ciudadanos ven en la sanidad privada una inversión en su salud y bienestar a largo plazo.
En Cataluña, donde hay actualmente más de 200 hospitales y clínicas privadas, se ha consolidado un modelo de sanidad mixta donde los usuarios pueden combinar las ventajas del sistema público y privado, aprovechando el mejor de cada uno.
Comentarios