Abuso de pantallas. Hay que vigilar.
Abuso de pantallas. Hay que vigilar.

Redacció

Las pantallas y los más pequeños: cómo evitar abusos? Los expertos lo explican

Sara Soria, psicóloga clinica, y Eva López, educadora social, hablan de la necesidad de revisar el abuso de pantallas en los niños y jóvenes y acompañarlos en un uso saludable.

Pautar unas buenas prácticas de uso de las pantallas es imprescindible para evitar problemas a casa y en el desarrollo natural de los niños, desde los más pequeños hasta los adolescentes. Vivimos en una sociedad donde las pantallas forman parte de nuestro día a día: ya no es solo la televisión, sino que los móviles, las mesitas y los ordenadores lo han acaparado todo. Trabajamos y hacemos vida social a través de ellas. Por eso es difícil discernir cuando hay un abuso de estos elementos, con los peligros que esto comporta por los más pequeños.

Sara Soria, psicóloga clínica, y Eva López, educadora social, profesionales del Consorcio Sanitario del Maresme, explican la necesidad de elaborar una serie de pautas y restricciones en el uso de las pantallas, así como también abrir vías de negociación con los hijos e hijas y, claro está, ser un buen ejemplo para ellos. Una gran mayoría de expertos, explican, consideran que hay unas recomendaciones de tiempo diario de uso que no se tendría que superar. Son estas:

  • De 0 a 3 años, pantallas nada; algo que todos los pediatras concluyen
  • De 4 a 6 años se recomienda un uso limitado de 30 minutos, máximo una hora, siempre supervisado con los adultos
  • De 7 a 12 años se recomienda una hora al día, supervisada y que este periodo no sea en ningún caso el ocio principal de los pequeños
  • Adolescencia: No hay un límite establecido, pero sí hay que establecer un marco general familiar

Las expertas en este campo destacan que hay que hacer "una negociación en cada etapa", educando de forma responsable por el buen uso de las pantallas. Teniendo en cuenta los límites pactados en tiempos, espacio y contenido en función de la edad y maduración del niño. Las pantallas facilitan un tipo de ocio pero no tendría que ser el principal. Una recomendación clave es evitar que vaya en detrimento de aspectos básicos, cómo el rendimiento escolar, unos buenos hábitos de alimentación, ejercicio físico y sueño.

Una de los datos más preocupantes que ofrecen es que más de la mitad de los jóvenes conectan con desconocidos a Internet. Por lo tanto, el más importando no es prohibir, sino educar y alertar sobre los peligros. Y tener muy claro que las redes sociales conectan pero desvinculan, dejan apartada la convivencia genuina, la que hay un contacto directo y presencial. Los tres pilares que tienen que empujar al adolescente (académico, familiar y relacional) tienen que mantenerse intactos y no erosionarse por la presencia de pantallas, redes sociales, etc.

No hay que criminalizar pantallas, sí estar alerta

Tanto Soria cómo López coinciden: "No tenemos que criminalizar las pantallas, tampoco alarmarnos, pero sí detectar aquellos usos problemáticos que pueden derivarse". Y también añaden que los adultos somos un espejo por los más pequeños. Qué pensarán si limitamos su uso y nosotros estamos todo el día mirando el móvil en casa? En este sentido, seguir una serie de pasos para detectar posibles problemas:

  1. Analizamos nuestro comportamiento: somos un modelo bueno por ellos?
  2. Explicar a los adolescentes el que nos preocupa: si están demasiado irritables, tristes, con cambios de humor... transmitir nuestros motivos.
  3. Pactar unos nuevos límites si no van bien: las pantallas no pueden ser un aislamiento.

Cuando se pactan unas normas y unos límites con los adolescentes, hay que tener en cuenta que estos tienen que tener margen de maniobra. Son una limitación, pero también pueden ser un motivo de premio si se hace un buen uso: tanto importante es alertar cómo reforzar los buenos comportamientos.

Y naturalmente, siempre se tiene que pedir ayuda a los profesionales cuando vemos que no nos salimos. No pasa nada para hacerlo, al contrario, hay muchos agentes socialitzadors y profesionales que pueden dar con la clave del problema.

Comentarios