Las tareas empezarán a principios de 2024 y tendrán una duración de cinco meses
El Departamento de Territorio ha licitado las obras para completar el desmantelamiento de las antiguas áreas de peaje de la C-32 norte (al Maresme) y de la C-33 (al Vallès Oriental) por un importe de cerca de 5,2 millones. Las tareas darán continuidad a la actuación que ya se ejecutaron en los carriles centrales a raíz de la finalización de las concesiones de estas autopistas. Los trabajos empezarán a principios de 2024 y tendrán una duración de cinco meses.
Las obras proyectadas consisten principalmente en el desmantelamiento de las marquesinas y otros elementos de las áreas de peaje que restan a la C-32 norte y C-33, tanto al tronco cómo a los laterales, y la restitución de la vialitat necesaria, en ambos sentidos de la circulación. En concreto, las áreas de peaje incluidas son:
- Lateral del peaje de Alella
- Lateral del peaje de Premió
- Troncal del peaje de Vilassar
- Lateral del área de peaje Sant Andreu de Llavaneres
- Lateral del área de peaje de Sant Vicenç de Montalt
- Troncal del área de Arenys de Mar
- Lateral del peaje de Arenys
- Troncal del área de peaje de Santa Susana
- Troncal del área de peaje de Mollet
Las obras incluirán el escombro de todas las isletas que conforman los pasos o vías de peaje, así como los guardarraíles, cabinas de peaje y los equipamientos e instalaciones existentes. Así mismo, se adecuarán y pavimentaran las nuevas calzadas que se han proyectado, se adaptarán los elementos de drenaje y se colocará la señalización, balizamiento y guardarraíles.
La adecuación paisajística de las zonas liberadas y la implementación de nuevos usos en las antiguas playas de peaje troncales serán objeto de proyectos que se encuentran en fase de estudio.
A raíz de la finalización de los peajes de la C-32 norte y C-33, el Departamento de Territorio ejecutó entre el verano y el otoño de 2021el desmantelamiento de las marquesinas y otros elementos en los carriles centrales de las áreas de Vilassar de Dalt, Arenys y Santa Susanna, de la C-32 y de la C-33 a Mollet del Vallès. Los trabajos contaron con un presupuesto de 5 millones.
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