Amenaza con quemarse vive después de perder las ayudas de la renta mínima

Un hombre de 51 años, M. .A. B., fue jueves por la mañana a las oficinas de los servicios sociales de Arenys de Mar empapado de gasolina y con un mechero a la mano, amenazando de quemarse. Finalmente, no lo ha hecho. Ha sido detenido por amenazas y está siendo atendido por las urgencias psiquiátricas del hospital de Mataró, han indicado fuentes del consistorio de Arenys. El hombre ha protagonizado este incidente después de que miércoles los servicios sociales le comunicaran que la Generalitat le retiraba la renta mínima de inserción de 400 euros que percibía. La administración había detectado que últimamente había viajado varios golpes en el Marruecos, un hecho que no se considera compatible con la percepción de la ayuda.
La renta mínima de inserción, o PIRMI, es una medida para atender los ciudadanos que sufren una situación económica grave. Por ejemplo, aquellos trabajadores en paro que ya han dejado de cobrar la prestación por desocupación y no tienen acceso a ninguna otra ayuda la pueden solicitar. Los beneficiarios siguen un Plan Individual de Reinserción Social y Laboral.

El Departamento de Bienestar y Familia de la Generalitat, que administra esta ayuda, detectó que en los últimos meses el hombre de Arenys había viajado al Marruecos en varias ocasiones. Este hecho, consideraba la administración, sería compatible con estar buscando trabajo y delataría un tren de vida libre de dificultades económicas.

Por este motivo, la Generalitat decidió retirarle la ayuda de 400 y los servicios sociales de Arenys, que la gestionaban, se lo comunicaron miércoles por la mañana. Ya entonces, el hombre, muy enfadado, protagonizó una escena de gritos y nervios a las dependencias municipales, narran fuentes del consistorio.

Esta mañana, el hombre ha vuelto a las oficinas. Chubasco de gasolina y con un mechero a la mano ha amenazado de quemarse ante los trabajadores, que han avisado a la policía local. Los agentes quehan acudido lo han detenido por amenazas y coacciones y se lo han llevado a sus dependencias.

Allá el hombre hablaba solo y seguía alterado, y por eso los agentes han trucado a una ambulancia, que le ha diagnosticado taquicardias y lo ha trasladado al hospital de Mataró. Allá sigue en un box de las urgencias psiquiátricas y custodiado por los Mossos d'Esquadra.