Comediantes: 40 años de calle, teatro, fiesta, máscaras y libertad

El director de la compañía, Joan Font y y el director artístico Jaume Bernadet sientan alrededor de una mesa llena de máscaras. En todas hay algún recuerdo de una etapa de su vida teatral. No dudan al ponerse una y transformarse durante segundos en alguno de los personajes de sus obras. Al lado, un perchero lleno de vestidos curiosos, que también se prueban. El trabajo en la sede de los Comediantes en Canet de Mar no se para. El show no puede acabar. Recientemente se anunció que serían la compañía residente de la temporada 2012-2013 de la Orquesta Sinfónica del Vallès. Por ellos, los 40 años son un momento para reflexionar qué han hecho y hacia donde tienen que ir.

Mirando atrás, Joan Font, fundador de la compañía, llega hasta los inicios, a principios de los 70, con aquella representación enloquecida del 'Non plus plis' y el nacimiento de Comediantes que fue "fruto de una confluencia de diferentes historias". Aquella primera representación al Instituto del Teatro dejó a todo el mundo boquiabierto. Posteriormente, los ofrecieron actuar en Granollers y la máquina se puso en marcha. El 'Non plus plis' hablaba de la fiesta y de unos poderes: el político, militar, religioso y judicial que provocaban una revuelta con los espectadores e invadían un espacio público. Font ha bromeado que un amigo suyo que vio la obra le recordó: "Todavíahablamos en casa y decimos que pasó algo, pero no entendimos nada. Yo le respondo que nosotros tampoco", ha añadido. "La gente recibía energía, ganas de comunicar de una forma diferente, una cosa nueva y fresca, y muy física. El texto desaparecía, no era mim y era acción, y explicábamos rituales y ceremonias", ha expuesto.

Comediantes nació con una vocación clara, según Font: "Explicar historias nuestras, en el momento presente, donde el texto no fuera el eje central, en un tiempo dondehabía una dictadura y una censura a los textos, quisimos hacer un lenguaje más físico y recuperar este mundo popular y de las máscaras y subvertir los espacios". Para hacerlo dieron protagonismo a los gigantes y a los renacuajos en el espacio escénico para darlos un nuevo un valor. Notuvieron bastante con esto sino que cambiaron el modelo de teatro a la italiana de un público situado ante el escenario para poner la gente mirando en rotllana al suyo cercando. "No teníamos ninguna pretensión ni ningún tipo de vergüenza", ha asegurado.

La importancia de estar en la calle
La compañía empezó a los últimos años del franquismo. En una actuación multitudinaria en el San Juan Evangelista de Madrid decidieron, al finalizar la obra, salir a la calle. "Afuerahabía unas 2.000 personas y vinieron los grises a caballo y echando bombas de humo. Era desproporcionado con la idea de hacer una fiesta y bailar la calle". Font ha destacado que en aquel momento vio una cosa clara: "Los molestaba que estemos saltando, bailando, tocándonos en medio de la calle que era un espacio público de todos. A partir de aquel momento me dije que ocuparía la calle si pudiera hasta que me muriera". De hecho, ha señalado que en la calle ahora están pasando muchas cosas y ha dicho que los cambios tienen que pasar en este lugar, que también es de placer, fiesta, aprendizaje, arte y maravilla.

Las diferencias entre el público de hace 40 años y el actual son claras por Font: "Antes todo el mundo estaba contigo, quería el cambio y que se acabara la dictadura". "Formabas parte del sueño col•lectivo y abrías puertas y ventanas de aire fresco, de placer, de juego, fiesta y maravilla y todo el mundo estaba dispuesto a jugar", ha dicho, al tiempo que ha apuntado que "Comediantes ha crecido y es un barco muy gordo y en aquel momento no lo era". Así mismo, ha remarcado que "la gente sigue siendo abierta y teniendo necesidad de tener contacto y sentirse gregari. El Barça funciona porque la gente tiene ganas de salir de las familias y del núcleo cerrado e ir a un lugar y sentirse que forma parte de una col•lectivitat".

Bernadet ha hecho énfasis en la idea de libertad que representa Comediantes. De hecho, ha explicado que la comisaria de la exposición de Shanghai los dijo el pasado año que Comediantes trajeron "color" en aquella España gris de los 70 e hicieron crecer la libertad. Así mismo, ha explicado que en Turquía, al final de uno el espectáculo, la comunidad cristiana y árabe destacaban que habían saltado juntos y disfrutando cuando recelen los unos de los otros. "Los espacios donde la libertad ha sido más restringida voces esta reacción", ha dicho.

Ahora que los Comediantes cumplen 40 años, es la hora de encarar el futuro. "Ahora estamos a la etapa de mirar todo el que hemos hecho, mirar el entorno y cumplir 40 años, que es una excusa para valorar el camino recorrido", ha dicho Bernadet. Font ha apuntado que ahora se tienen que valorar y revalorar cosas. "A mí que soy más grande, tocaría un poco pasar juego y poder trabajar de otra forma, ser reflexivo y no correr tanto. Los 40 años tienen que servir para hacer un análisis y es un momento complicado y vale la pena ver toda la experiencia y el camino para hacer uso y abuso", concluye.