Capgròs
La línea urbana de autobuses de Sant Vicenç de Montalt, la C-21, volverá este próximo lunes a sus horarios antiguos y después del fracaso de las mejoras en horarios y recorridos impulsadas hace sólo una semana. Según ha explicado el regidor de Movilidad, Francesc Baselga, la mala planificación ha hecho que estos días "el servicio haya sido un desastre" y no se hayan cumplido las expectativas. Y no tanto sólo esto, sino que se ha provocado un efecto inverso, con un par de pérdidas diarias de viajes.
El titular de Movilidad, Francesc Baselga, ha explicado que las mejoras incorporaban una nueva parada al Centro Cívico, respondiendo así a una vieja reivindicación de la gente mayor del municipio. Además, se preveía que la frecuencia de paso se redujera de la media hora habitual a los veinte minutos, hecho que no se ha podido mantener a lo largo de ninguna jornada de servicio.
Otro de los agravios que han provocado las hipotéticas mejoras es la descordinació con el horario de trenes de la estación de cercanías de Caldes de Estrac (Maresme). "Ha habido muchas quejas de gente que perdía el tren porque el autobús no llegaba a tiempo con los nuevos horarios y recorridos", ha comentado Baselga.
Así pues, a partir de lunes día 20 los horarios y recorrido volverán a ser los quehabía finos hace quince días. Baselga ha explicado que la mejora del servicio se tendrá que aplaçar al menos un año, puesto que en un plazo corto de tiempo tienen que empezar varias actuaciones que modificarán la realidad urbanística del municipio, como la rotonda que ha prevista a la carretera N-II.
"He hecho la propuesta al consistorio de crear una comisión de movilidad para evaluar qué posibles cambios hay que hacer con los cambios urbanísticos que nos esperan", explica Baselga. El regidor, además, ha comentado que en el futuro se podrían recuperar las conversaciones con los Ayuntamiento de Arenys de Munt o Sant Andreu de Llavaneres para mancomunar algunos servicios de transporte interurbano.
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