El Departamento de Derechos Sociales ha intervenido en el centro Mas Silvestre de Dosrius (Maresme) tras los hechos violentos protagonizados por tres menores tutelados el pasado 30 de abril. Según ha avanzado La Vanguardia, estos jóvenes inmigrantes intentaron robar a punta de navaja los teléfonos móviles de tres niños de entre 11 y 13 años en pleno día, en un parque público.
A una de las víctimas, también menor, le hicieron tocamientos, y durante toda la acción mantuvieron una actitud intimidatoria y violenta. Aunque el Departamento de Derechos Sociales y los Mossos apuntan que se trataría de hechos puntuales y que ya se han solucionado, desde el Ayuntamiento de Dosrius reclaman el cierre del centro porque aseguran que genera muchos problemas de inseguridad e incivismo.
Traslado de los menores
Mas Silvestre funciona desde 2017 como Dispositivo de Atención Inmediata para jóvenes extranjeros no acompañados. Fuentes del Departamento de Derechos Sociales explican a Capgros.com que actualmente no hay “una situación de tensión” en el centro, pero confirman que los tres menores responsables de los incidentes “han sido trasladados a un centro más adecuado a su perfil, donde estarán más controlados”. Además, anuncian una “ligera reducción” del número de plazas y el refuerzo de la plantilla de monitores para mejorar la convivencia.

Mas Silvestre, centro de menores tutelados en Dosrius
Desde Mossos d'Esquadra confirman los hechos violentos del día 30 de abril pero los definen como "un hecho puntual", ya que no se ha producido "ningún otro incidente grave" vinculado a menores de Mas Silvestre en el municipio del Maresme. “Hay muy buena colaboración con el centro; hemos hecho jornadas de formación con los monitores y educadores y siempre estamos a su disposición. La situación está tranquila”, constatan las mismas fuentes policiales, en línea con lo que defiende Derechos Sociales.
El ayuntamiento quiere que se cierre el centro
Los hechos violentos, sin embargo, han generado una gran alarma en el municipio. En declaraciones recogidas por La Vanguardia, la alcaldesa, Sílvia Garrido (PSC), ha lamentado la falta de respuesta por parte de la DGAIA ante las peticiones de soluciones. Consultado por Capgròs, el concejal de Seguridad, Lluís Farrerons (Junts), ha reclamado directamente el cierre del centro. "Consideramos que se debería clausurar ya que no está en el lugar adecuado", ha afirmado Farrerons, que constata que Mas Silvestre "nos genera mucho trabajo a nivel policial y muchos problemas de incivismo".
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