Francesc Teixidó

2010: vaso medio pleno o vaso medio vacío ?

En general en economía, es más importando aquello que la gente piensa que está pasando que no el que está pasando en realidad: pesan más las expectativas, la confianza...
No insistiré al destacar el que todo el mundo conoce sobradament. 2010 ha sido un año muy difícil, en el que muchas familias han sufrido de forma brutal los efectos de la crisis y sus consecuencias sociales: paro, precariedad y riesgo de exclusión social. Pero también es cierto que a otras muchas no los ha afectado tanto. Y son estas familias y empresas las que pueden contribuir a la recuperación.

Creo que es en estos momentos cuando más importancia tiene que tomar la Política, nacional y también local. Y dar sentido a todos los esfuerzos que se hacen desde el consistorio: no sólo la pesada tarea de proteger los más desfavorecidos y preservar la cohesión social o las grandes inversiones de transformación futura del modelo económico de la ciudad (TecnoCampus, Corte Inglés, …) o el estímulo de la formación profesional… Sino también aquel montón de pequeñas iniciativas dirigidas a animar la gente a salir a la calle, compartir fiestas tradicionales, fomentar la vida vecinal y la solidaridad, iluminar las calles, promocionar la ciudad cara a los visitantes,… impulsando en definitiva a disfrutar y utilizar una red urbana de comercio y servicios de tremenda calidad.

Todo ello, configurando un nuevo escenario de crecimiento seguramente más débil, pero al mismo tiempo mucho más sólido, basado en el cambio de modelo económico, en la capacidad exportadora y en la inversión productiva. Por eso quiero enviar un mensaje de confianza en nuestras propias posibilidades, de recuperación del ingenio y de los valores perdidos en épocas pasadas. Y no lo haría si no confiara en Mataró y su tejido asociativo, en la iniciativa, creatividad y talento de los emprendedores y empresas de nuestra ciudad, en las oportunidades que tenemos ahora entre manso y en la convicción que entre todos contribuiremos a construir el Mataró de futuro que nos merecemos.

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