El alcalde, David Boto, ha hecho "un llamamiento a la convivencia", a raíz de la polémica vivida ayer domingo por el arrossada de Rocafonda. Boto ha asegurado que hay que "respetar los derechos individuales de todo el mundo como ciudadano, sin entrar en provocaciones".
"La ciudad tiene retos muy importantes y que todos tenemos que hacer piña para afrontarlos", afirma el alcalde
El arrossada, que congregó más de 200 personas a la plaza de Rocafonda, vino precedida de polémica por las desavenencias entre los organizadores, un grupo de comerciantes, y la asociación de vecinos del barrio. Los promotores cocinaron el arroz con costillas de cerdo, y la entidad los había pedido que, a cambio de apoyarlos a nivel organizativo, no lo hicieran por respecto a la numerosa comunidad musulmana del barrio.
Derechos y deberes
Boto, en el transcurso de una visita de obras a la escuela Rocafonda, ha invitado a dejar atrás estas polémicas porque "hay que entender que la ciudad tiene retos muy importantes y que todos tenemos que hacer piña para afrontarlos". El alcalde ha reiterado, como ya hizo en campaña en referencia a los recién llegados, que en la ciudad "todo el mundo tiene que compartir los mismos deberes".