El gobierno municipal de CIU ha aprobado finalmente el presupuesto para el 2012 gracias con el apoyo del PSC, el único partido que votó a favor en el pleno extraordinario celebrado ayer jueves, día 16. Los ecosocialistas se abstuvieron y el resto de grupos –PPC, PxC y la CUP-votaron en contra. Mataró contará finalmente con un presupuesto más reducido del previsto –y aprobado- inicialmente, después de que el decreto de Rajoy del 30 de diciembre pasado prohíbe los ayuntamientos endeudarse más. A efectos prácticos, el Ayuntamiento se queda sin los 11 millones previstos inicialmente para inversiones, y el presupuesto se ha reducido de 196 millones iniciales al 184,5 millones. Esta reducción presupuestaria ha obligado a renunciar a algunas de las inversiones previstas y priorizar actuaciones más urgentes, como por ejemplo la reparación de los muros de la riera de Santo Simó o la puesta a punto de la nueva biblioteca Antoni Comas del Matadero. La regidora de Administración y Atención Ciudadana, Carolina Soler, destacó que se mantiene la apuesta del gobierno municipal por el gasto social y el pago de la deuda. Según explicó, cada día se pagan 28.000 euros en intereses.
El PSC votó sí en el presupuesto, como ya hizo en la aprobación inicial y como fruto del acuerdo logrado con CIU. Un acuerdo firmado por "responsabilidad", según reiteró ayer la cabeza del grupo Joan Antoni Baron, que también celebró que el gobierno haya aceptado buena parte de las enmiendas presentadas por su grupo. Aún así, Baron no se ahorró las críticas en el "gobierno debilitado" de Joan Mora, a su dificultad para garantizar la gobernabilidad de la ciudad y por su "carencia de proyectos e ideas". Baron también le pidió al alcalde que "reflexione" sobre las formas que usa en su relación con la oposición.
También desde las filas de ICV-Euia le reprocharon a Mora las malas formas y la carencia de transparencia hacia la oposición, sobre todo a raíz del anuncio hecho a través del web municipal sobre la recuperación de parte de la deuda de la Generalitat. Así le reprochó el portavoz, Esteve Martínez. Los ecosocialistas, no obstante, se abstuvieron en la votación considerando que a pesar de tratarse de un "presupuesto lastrado", los números para el 2012 permiten afrontar las deudas pendientes. Por Martínez, el peor del presupuesto es el recorte en la aportación a la IME y la IMPEM.
Los votos negativos
El PPC votó en contra del presupuesto lamentando que el gobierno no haya tenido en cuenta sus enmiendas, pensadas para no hacer aumentar el gasto pero si para mejorar la seguridad a las calles y preparar las calles y el comercio ante la llegada del Corte Inglès. El portavoz, José Manuel López, defendió el decreto de Rajoy que limita el endeudamiento explicando que "una familia que no puede pagar la hipoteca no tendría que poder pedir un crédito para cambiarse los muebles". PxC también votó en contra del presupuesto, como ya hizo en la aprobación inicial. Su portavoz Mònica Lora protestó por el retraso del gobierno al reaccionar después del decreto del 30 de diciembre, y que no dio tiempo al resto de grupos a presentar más alegaciones. Por el regidor de la CUP, Xavier Safont Elige, el presupuesto del 2012 no satisface nadie y esto "es un fracaso col•lectivo". Además, lamentó que el gobierno no haya aceptado buena parte de sus alegaciones, destinadas a racionalizar la gestión, sacar rendimiento de los equipamientos e invertir en más educadores para evitar conflictos a los barrios.
El alcalde, Joan Mora, cerró el debate insistiendo una vez más en la situación económica del Ayuntamiento, marcada por sus deudas y el de Pumsa, que compromete todo tipo de inversiones. El alcalde, además, respondió a las críticas de la oposición asegurando "que si fallan cosas intentaremos corregirlas" y ofreciendo más "diálogo y transparencia. A cambio, pero, pidió a los grupos de la oposición que lo "correspondan". "La ciudad nos necesita a todos, porque hay inversiones que tendremos que ir a buscar a otras administraciones y la manera de conseguirlas será trabajando juntos", dijo.

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