La Junta de Sala Cabañas ha presentado su dimisión en bloque debido a divergencias internas. La sección teatral del Centro Católico y puntal del teatro amateur de la ciudad queda así temporalmente sin dirección, a la espera de la convocatoria de una asamblea para escoger los nuevos responsables. Las "claras divergencias de criterios" que se han producido en el sí de la junta presidida por Toni Grané durante todo este curso son el principal motivo de la dimisión, según se apunta desde la Sala en un comunicado.
"Durante la presente temporada se han producido situaciones en las que se ha puesto de manifiesto una clara divergencia de criterios entre los miembros de la junta", reza el comunicado. El mismo texto explica que durante los 5 años que se ha mantenido la Junta, se han impulsado "cambios sustanciales" para aportar "nuevas dinámicas y procedimientos". Esto ha comportado mejoras en Sala, explican, pero con un coste "demasiado alto, porque ha generado conflictos innecesarios".
Carencia de implicación
Estos conflictos se han traducido en desacuerdos constantes en el sí de los miembros de la Junta, cosa que ha hecho, según añade el comunicado, que se hayan tomado "decisiones y actuaciones que no han seguido el procedimiento de gestión aprobado por la misma". La junta saliente también expresa la preocupación por el que hecho que nohaya más socios de la entidad que se impliquen en su gestión.

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Los pasos a seguir
Ante esta situación, en sesión extraordinaria celebrada el pasado viernes, el presidente y los nuevo miembros restantes de la Junta decidió dimitir en bloque. Así lo notificaron al presidente del Centro Católico, Antoni Blanch, porque pase a presidir directmaent la Sala Cabañas. A Blanch le piden que designe una Junta Gestora que traiga el día a día de la Sala hasta la celebración de la próxima Asamblea General.
Toni Grané
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