El derecho a la intimidad, la protección de datos y el Spam

Últimamente nos encontramos bajo un bombardeo constante de corred basura a nuestros buzones digitales. Mucha gente se debe de preguntar cómo es posible que tantas empresas tengan sus direcciones de correo, y las usen sin ningún impedimento, para hacerlos llegar todo de propuestas comerciales.

La explicación parece sencilla. Hay empresas que se dedican a recopilar las direcciones de páginas web y foros públicos, que después revenden a compañías de marketing, que pagan un importe para cada dirección.
No se trata de crear una situación de pánico precisamente, puesto que evidentemente, la mayoría de empresas no se dedican a comercializar con nuestros datos, pero desgraciadamente hay otras muchas que sí lo hacen.
Estas listas de direcciones, pueden llegar a venderse después a compañías legítimas, que cruzan estar comprando direcciones de usuarios que han dado su consentimiento. En definitiva, sea a través de una de estas empresas que han adquirido las listas il•legales o a través de una otro que cree hacerlo de manera legítima, la spam se lleva a cabo sin ninguna contemplación.
Por todo esto, el derecho a la intimidad en Internet está generando una cierta controversia. Por un lado tenemos la Ley de Servicios de la Sociedad de la Información (LSSI), que permite penalizar acciones de 'este tipo. Según el Ministerio de Ciencia y Tecnología, la spam en España puede denunciarse "contactando con una asociación de consumidores o con la Secretaría de Telecomunicaciones, por correo, teléfono o usando el formulario de la sección "Consultas" de http://www.lssi.es.

Por otro lado, también en Europa, una directiva del 2002 mantiene lo corréis basura fuera de la ley: sólo se puede enviar a personas que expresamente lo aprueben (sistema "opt-in"). Pero a pesar de todo, la invasión es constante y desesperando.

La mayoría de estos correos, alrededor del 75% provienen de fuera de la Unión Europea, y la gran mayoría de ellos de los Estados Unidos.

Como curiosidad, se comenta que el primer correo electrónico considerado como spam, fue enviado ahora hace diez años, concretamente el 12 de abril de 1994, por el despacho de abogados Canter & Siegel de Arizona.
Este primero spam titulado "Green Cardo Lottery- Final One?" fue enviado a diferentes grupos de discusión y se puede ver en esta dirección: http://www.google.es/groups?selm=2odkut$3uno7@herald.indirect.com

También os podéis leer un artículo del "mismíssim" Bill Gates sobre el tema del Spam (en inglés):
http://www.microsoft.com/billgates/columns/1998essay/3-25col.asp

Actualmente se dispone de sistemas de filtro anti-spam, instal•lats a los servidores de correo, o a los mismos ordenadores de los usuarios, que pueden pero, con una configuración incorrecto, acabando eliminando también mensajes “buenos”. Además, al tratarse de sistemas "inteligentes" que aprenden con el tiempo, a menudo resultan complejas de configurar para un usuario inexperto. De todos modos y de momento es la única solución disponible, que la mayoría de servidores de correo ya están implementando.

Por lo tanto el problema continúa y continuará hasta que no se endurezca la ley en este sentido, y se acabe penalizando duramente esta práctica fraudulenta. Mientras tanto os recomendamos no poner vuestra dirección de correo a cualquier lugar de Internet. Por eso podéis mantener dos correos diferentes, vuestro personal y otro de público, que usáis para dar de alta a formularios diversos, que acabará siendo objetivo indiscriminado de los “señores del Spam”.

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