El gobierno municipal ha asegurado este viernes que no existe ningún plan para abrir una nueva mezquita en Mataró. El ejecutivo ha salido así al paso de los rumores sobre la creación de un nuevo oratori al barrio de Rocafonda, que se dejaron sentir ayer jueves al Pleno municipal de enero. El primer teniente de alcalde, Joaquim Fernàndez, ha confirmado que la comunidad musulmana sí que tiene intención de trasladar la mezquita del polígono Mata-Rocafonda a un nuevo local más amplio y ubicado en el mismo sector. "En ningún caso hay la demanda de nuevas mezquitas a la ciudad", ha especificado. El Ayuntamiento está elaborando un informe de compatibilidad urbanística para dictaminar si el nuevo local cumple con las condiciones para convertirse en centro de culto.
Propuesta de moratoria
Esta cuestión se trató en el Pleno municipal a raíz de la moción que presentó el grupo municipal del PP porque se aprobara una moratoria en la concesión de licencias para la apertura de centros de culto. A pesar de no especificarlo en la moción ni en el Pleno, la propuesta de los populares vendía motivada por la posibilidad que la comunidad musulmana estuviera buscando un emplazamiento en la ciudad para una nueva mezquita. La moción fue muy criticada por la CUP, ICV y PSC. Los primeros lamentaron que se aprovechara el contexto de crisis para negar la libertad de culto. Esteve Martínez, de ICV, la tildó de "sectaria y demagógica", y consideró que atenta "contra la libertad religiosa y la cohesión social". Los socialistas también se mostraron en desacuerdo con la propuesta, y aseguraron que tampoco era factible. Plataforma x Cataluña los acusó "de oportunismo". La regidora Mónica Lora dijo que en el próximo pleno presentarán una propuesta de moratoria "en firme"
El gobierno de CiU, finalmente, se mostró dispuesto a estudiar la propuesta de moratoria, después de acordar con el PP convertirla en ruego y pedir un informe previo al Secretario del Ayuntamiento sobre la viabilidad de esta medida.

Exterior de la mezquita de Rocafonda
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