El mataroní Pere-Mártir Brasó se queda en blanco al Colegio d’Aparejadores

"Me he quedado en blanco" es el expresivo título de la nueva exposición del artista mataroní Pere-Mártir Brasó, que se inaugura este viernes en la sala del Colegio de Aparejadores. La muestra, comissariada por la Asociación Santo Rebrote, presenta un Brasó muy minimalista, que prácticamente prescinde del color para retratar personajes y figuras en grandes formatos.

Brasó se adentra en el "vacío físico y mental, que no emocional" que representa según él el blanco. El negrosurge como contraste, y también algusn repuntes de rojo o moratón. El artista recupera la influencia de la il•lustración y el cómico, clave en su pintura. Blancos guixats y manchados por líneas rectas, curvas o montañosas, por letras y cifras, personas, animales y cosas. Son piezas a veces salidas del azar, inclús del camuflaje de algunas pinturas anteriores ahora sacrificadas o reconvertidas, y con referècnies a algunos de los artistas que le motivan a quedarse en blanco como forma de meditación. Las obras que se podrán ver al Col•legi de Aparejadores siguen la línea de las creaciones que Brasó presentó a la última col•lectiva Santo Rebrote y a la que fue finalista a la bienal Torres García.

Se trata de un nuevo paso en la trayectoria de Brasó, que ha expuesto en dos ocasiones al Espacio Renacuajo y también en salas como el Museo Monjo de Vilassar de Mar, la galería Lolet Comas o a Enblanc Espacio de Arte, entre otros.

Viernes, día 2. A 2/4 de 8 de la tarde al Colegio de Aparejadores