El Pacto CiU-PSC

El apretón de manos de manso entre el alcalde Mora y la cabeza del grupo municipal del PSC, Joan Antoni Baron, es sin ningún tipo de duda una de las imágenes del año. Y una buena noticia para acabar el 2011 y encarar un 2012 que se prevé económicamente complicado. El acuerdo entre CiU y el PSC garantiza la aprobación de las Ordenanzas Fiscales y del Presupuesto para el año próximo, un trámite mucho más que necesario en tiempo de dificultades económicas, puesto que en caso contrario la ciudad sehabría visto más que resentida. La aritmética se ha acabado imponiendo a cualquiera otro criterio y, para llegar al pacto con el PSC –con quien suma una amplia mayoría-, CiU ha tenido que dar calabazas al PPC, con quien habría firmado meses atrás un acuerdo de gobierno a pesar de no garantizar la mayoría necesaria. Mora calificó de 'malentendido' el comprensible disgusto de los populares, pero serían necesarias algunas explicaciones más para entender una jugada que ha impedido que CiU y el PSC llegara antes a un acuerdo. Aún así, hace falta ahora celebrar que este pacto haya sido posible, lamentar que el acuerdo no haya llegado antes, y confiar en que este primer ensayo de sociovergència pueda dar pie a una colaboración más estrechada además largo plazo entre las dos grandes fuerzas de la ciudad para poder salir adelante la ciudad.