Toni Civit, acompañado por el regidor Gení Bargalló y el presidente local de ERC, Sergi Penedès, ha hecho hoy balance de los primeros cien días de los últimos 64 años en los que la formación republicana forma parte del gobierno municipal. Hagamos un balance moderadamente positivo. Se ha hecho mucho trabajo pero el funcionamiento del ayuntamiento es pesado, dice Civit, quien asegura que todavía se nota una cierta inercia de mayoría absoluta, en relación al funcionamiento del pacto tripartito entre PSC, ICV y ERC.
Civit ha recordado que en el momento de firmar el pacto, ERC ya manifestó su voluntad de convertirse en el acento catalanista del gobierno. En este sentido, ha valorado positivamente la inminente creación del servicio de política lingüística que dependerá del área de presidencia. Las mociones sobre la adhesión a la campaña Un país, una bandera y la propuesta de un nuevo estatuto por catalunya, y la retirada de las antiguas placas del Ministerio de la Vivienda son otras de las iniciativas que ERC ha llevado a cabo en el ámbito catalanista.
En referencia al pacto tripartito, Civit ha recordado que se firmó para apoyar a la candidatura de Manuel Mas como alcalde. El portavoz del grupo municipal de ERC ha asegurado que en caso de cambio de alcalde, habrá que reconsiderar el pacto. Civit ha respondido de este modo a la primera teniente de alcalde, Pilar Gonzàlez, que ha manifestado en reiteradas ocasiones su voluntad de ser alcaldesa.
Sobre la oposición, Civit ha lamentado que CiU dedique más esfuerzos a cargar contra ERC que contra otras fuerzas ideológicamente más distantes y ha criticado abiertamente el Partido Popular por su poca presencia social. El PP no existe, ha afirmado rotundamente Civit.
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