Los grupo de Convergència i Unió fue el primero a replicar el gobierno ayer por la tarde después de que este presentara los presupuestos y el Programa de Actuación Municipal (PALMO) del 2004. La cabeza de CiU, Joaquim Esperalba, que intervino durante media hora, empezó su intervención ironizando sobre el hecho que antes de que él hubieran intervenido cinco personas –Pilar González-Agàpito, Toni Civit, Jaume Graupera, Joan Antoni Baron y Ramon Bassas, en los diferentes papeles de alcaldesa accidental, portavoces del grupo y regidor de Hacienda en sustitución de Consuelo Prados–: "Esto parece una coral, pero el problema es que la música desafina, no hay un buen solista y la partitura o está mal escrita o no existe", dijo.
Esperalba criticó la situación económica del Ayuntamiento que presentan los pressuposots: "Ustedes dicen que prácticamente tenemos la economía saneada y esto no es cierto, porque después los mismos regidores del gobierno van diciendo arriba y abajo que no pueden hacer nada porque no tienen dinero. Financieramente están con el agua al cuello". Según Esperalba, los presupuestos ni son coherentes ni afrontan la realidad: "Vuelven allá mismo de siempre. No hay un nuevo proyecto de ciudad ni una aportación por parte de ICV o ERC. Tengo la sensación que estamos a Atrapado en el tiempo", comentó haciendo referencia a la película.
La cabeza de CiU aprovechó también para aventurar quehabría un baile de bastones en el gobierno en cuanto a los criterios urbanísticos: "Entre el que decía el señor Vilert de crecer ninguno afuera y el que dice ahora el señor Graupera de crecer para adentro hay una gran contradicción", apuntó. Esperalba también criticó que el gobierno "se cree primero las mansiones por los regidores" y después piense con los servicios a ofrecer: "52 pisos es el que harán en todo el año? Esta es su política de vivienda?", se preguntó. Finalmente, en el terreno de la participación la cabeza de filas convergente aseguró no creerse las prometidas de participación del gobierno –"Ustedes buscan más el titular que no el trabajo hecho"– y reiteró la necesitar de acabar con los rifirrafes con las otras administraciones –"se tiene que acabar con esto de ser el 'Pepito grillo'".
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