Capgròs
Jose Corbacho y Juan Cruz no dejan El Hospitalet. El segundo film del tándem, después de la aclamada Tapas, vuelve a su ciudad para hablarnos de un tema tan cotidiano como preocupante : el acoso escolar. Pero no sólo de esto. El bullyng y sus consecuencias en primer término, la competitividad social y las presiones en segundo lugar y los miedos ante el que está por sobre tuyo conforman los puntos de atención de esta Cobardes.
La película coge la historia de Gaby (Eduardo Garé) como punta de un iceberg nada compasivo con las relaciones sociales que nos ha tocado vivir. El chico tiene mucho miedo de ir al instituto porque un grupo de chicos le hacen la vida imposible. La cabeza de esta pandilla de requesones adolescentes es Guille (Eduardo Espinilla), un joven que vive atemorizado ante la posibilidad de defraudar su padre. Pero los miedos no sólo son cosa de los niños, los padres tambiéntienen. Los padre de Gaby (Antonio de la Torre) tiene miedo de perder su trabajo y Merche (Elvira Mínguez), su madre, tiene miedo que la familia se hunda. Guillermo (Lluís Homar), padre de Guillo, tiene miedo del poder que lo rodea y a su mujer (Paz Padilla) le da miedo no conocer su hijo.
La mirada fresca y cotidiana, con un lenguaje cercano y cálido, son las armas que como el anterior Tapas hacen que este film sea una de las apuestas más destacadas de esta semana. Historias pequeñas, del día a día, arraigadas a la realidad y que hablan de incomunicación y desesperanza.
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