La capital de los Tres Tumbos

Mataró acoge este fin de semana el XVI Encuentro de la federación catalana de los Tres Tumbos. Se trata del acto que cierra el calendario festivo de la fiesta del campesinado en todo Cataluña. Mataró se convierte de este modo en la capital catalana de los Tres Tumbos. Acogerá unos 120 carruajes y cerca de 300 caballos de más de 60 municipios de todo el país, que desfilarán este domingo a mediodía. La paseada tendrá muy poco a ver con los Tres Tumbos habituales que se viven en la ciudad. Además de celebrarse cuatro meses más tarde del que es habitual, el circuito será mucho más amplio (va mucho más allá de circunscribirse a los viales del casco antiguo). Por este mismo motivo, tan sólo se darán dos vueltas al circuito, en ninguna parte de las tres que marca la tradición. En el entorno de esta cita se han organizado varias actividades que tienen lugar durante el fin de semana (exposición fotográfica, paseo con burros) y sehan sumado restaurantes y hoteles con ofertas especiales. Sorprende, en todo caso, que Mataró se haya convertido de repente en un referente de los Tres Tumbos, cuando en los últimos años la fiesta ha sufrido bastantes altibajos a la ciudad. El año 2010 se suspendió por carencia de participación, después de una serie de ediciones poco alentadoras. Los Tres Tumbos, además, arrastraban polémicas y rifirrafes entre los organizadores y el Ayuntamiento por temas organizativos y de recorrido. Es cierto que desde 2011 la fiesta se ha recuperado, de la mano de la parroquia de Sant Josep, y que en las dos últimas ediciones ha aumentado la participación y el público asistente. Pero de aquí a convertirse en referente catalán hay un camino muy largo. La celebración de este encuentro, de la cual el consistorio se ha preocupado enormemente de hacer difusión y venderla cómo una de las grandes citas festivas del año a la ciudad, está desconectada de la realidad cultural de la ciudad. Detrás suyo no hay un relato coherente ni unas raíces bastante fuertes que la justifiquen. Es, como se suele decir, una seta.