Imagen de una plegaria
Imagen de una plegaria

T. Rodon

La comunidad musulmana empieza la celebración del Ramadán

Durante un mes, hasta que salga el solo y se ponga los musulmanes se mantendrán en ayunas

Los musulmanes mataronins empezaron el pasado sábado, día 23, el mes del Ramadán, que corresponde al noveno mes lunar y que conmemora la revelación del Corán por parte de Dios a Mahoma. Durante veintinueve días desde que se observa la luna creciente, los musulmanes cambiarán sus hábitos cotidianos como una forma de renovar su fe. Los creyentes se mantendrán en ayunas desde las seis de la mañana y hasta casi las ocho del anochecer, aproximadamente desde que sale el solo hasta que se pone.

«No es un ayuno de penitencia, son horas para la reflexión, el perdón y la solidaridad con los otros», ha apuntado el presidente de la Asociación Cultural Islámica del Maresme, Mohamed Zaín Al-Nehlawi. Del ayuno,quedan exentos los menores de catorce años, las mujeres embarazadas, los enfermos y los viajeros, entre otros. Durante la jornada, los musulmanes también se abstienen de fumar, de beber y de mantener relaciones sexuales.

Según Dris Ahmadi, presidente de la asociación islámica Al-Ouahda, el ayuno no comporta un sacrificio tan grande como mucha gente se piensa: «Cuando nos quitamos por la mañana ya hace unas horas que hemos empezado el ayuno, así que en realidad no queda tanto porque llegue el final». Los creyentes mantendrán a lo largo de estos veintinueve días las mismas horas de plegaria que durante el resto de meses, pero se añade una oración alrededor de las nueve de la noche.

Todo y los cambios que el Ramadán representa en el día a día de los musulmanes, Ahmadi saca importancia al aspecto más «folclórico» y hace hincapié en la parte espiritual: «El más importante es la relación que se establece con los otros durante el Ramadán; son días de meditación en que visitas la familia, compartes con los más pobres y te reúnes para pensar como ayudar la gente que te rodea».

Archivado en:

Comentarios