Capgròs
La escuela Maria Mercè Marçal, en el barrio de Camino de la Sierra de Mataró, arrastra desde hace años un problema de control sanitario grave: la presencia de legionela. Un brote que no ha habido manera de eliminar a pesar de los numerosos tratamientos que sehan realizado. Finalmente el Ayuntamiento decidió crearuna nueva red de fontanería al equipamiento, las obras de la cual estarán finalizadas por el inicio del nuevo curso escolar. De este modo se tiene que poner fin a la reaparición persistente de la bacteria.
El año 2016 un análisis del circuito de agua caliente de la escuela, enmarcado en los controles periódicos que hace el consistorio a los equipamientos municipales, dio positivo en legionela. Ante esto se siguió el método habitual: instalar una red provisional paralela para hacer llegar el agua potable desde otro equipamiento cercano, y mantenerla hasta que pasado un tiempo la legionela no volviera a aparecer. A pesar de que en un principio parecía que se había erradicado, nuevos controles en verano de 2017 mostraron que había reaparecido. Ni los tratamientos realizados ni las modificaciones en la red de distribución de agua consiguieron acabar con el problema.
Todo ello ha comportado que, durante estos años, los alumnos y maestros de la escuela no pudieran utilizar el agua caliente. Ante esta problemática, el Ayuntamiento decidió el año pasado renovar toda la instalación, sustituyendo las cañerías e instalando nuevos grifos, de cara a eliminar cualquier elemento que pueda estar contaminado. En estos momentos los trabajos de fontanería ya han finalizado y se están haciendo los trabajos de revestimiento de obra. Antes de iniciar el curso se hará un tratamiento de limpieza y desinfección de la nueva red y una analítica de control.
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