La Feria se refia de la tradición para hacer contrapeso a la crisis

Los Firaires están notando especialmente la crisis económica. Cuánto las circunstancias son tan complicadas como hoy en día, los ciudadanos centran sus gastos en las cuestiones más básicas y suelen escatimar más en las actividades de ocio. El sector, pero, confía que en Mataró la experiencia será diferente. La Feria vuelve a ser fiel a su cita anual con la ciudad, con el deseo que los mataronins mantengan la misma fidelidad. "Venir a la Feria se ha convertido en Mataró en toda una tradición" constado Enrique Granell, presidente del Gremio de Firaires de Barcelona. Cómo dice Granell, Mataró es prácticamente la única ciudad catalana donde se instalan atracciones sin necesidad de ninguna excusa, ni fiesta mayor ni feria de muestras. La Feria como único y gran reclamo.

Los firaires están seguros que el acontecimiento estará atestado si la meteorología no los hace la pascua de manera tan acusada como el año pasado. El que ya no tienen tan claro es si los visitantes se gastarán mucho dinero en las paradas, bares, casetas y atracciones. "La feria es ocio. Cuando hay crisis, se recorta por aquí", comenta un Granell lacónico. Pero si hay menos gasto, intentarán aguantar. El que más los importa es que venga mucha gente, aunque sea a pasear y mirar y con los bolsillos vacías. "Esto significará que todavía los gusta la feria, y que el día que por fin se acabe la crisis, ya podrán gastar más dinero". Ya hace años que se escucha la célebre frase que el modelo de feria tradicional está en decadencia y cada vez interesa a menos gente. Una idea que sólo se rebate si la feria se llena de gente.

Quien finalmente se decida a ir a la Feria, que funcionará hasta el 7 de junio, se encontrarán un total de 122 atracciones y casetas de feria, repartidos por un recinto de cerca de 9.000 m2 en diferentes espacios del Parque Central: el Espacio Ferial, la explanada de Josep Reniu y Calvet y la plaza de la Música. Son algunas atracciones más que el año pasado, fruto de la menor coincidencia de ferias en las mismas fechas. Un año más, pero, la Feria de Mataró se quedará sin nòria, un elemento que siempre ha sido tradición pero que últimamente falla con su cita mataronina. Granell explica que su propietario no dispone de suficiente tiempo para desmontarla en su última ubicación, en Lleida, y traerla hacia Mataró. Cómo en años anteriores, las atracciones mantendrán la sectorització según la tipología de usuarios a la cual se dirigen. Además, serán rotativas, de forma que no se encontrarán todas las que sevieron el año pasado (volverá el Boomerang yhabrá una segunda pista de autos de choque).

Por otro lado, las ferias dispondrán de un punto de asistencia permanente de Cruz Roja, al Espacio Ferial, y también se instalará un sistema de megafonía general y uniforme para evitar al máximo la contaminación acústica al recinto, porque no afecte las zonas residenciales cercanas. La Fireta de Primavera, por otro lado, reunirá unos 42 expositores con una amplia oferta de artesanía y artículos de regalo. Se ubicará al paseo de la Ciudadanía, que une la Vía de Europa con la zona de atracciones. Por otro lado, la zona de bares y restaurantes estará situada como siempre a la plaza de Honorado Vilamanyà en el interior del antiguo Parque Central.habrá 8 bares y restaurantes.