Quien no ha seguido la reivindicación del maestros de las Islas Baleares para mantener el modelo de escuela mallorquina en lengua catalana y contenidos baleares?
Vale de decir que se han hecho sentir. Ellos y los padres y madres de las escuelas que los han apoyado y en ningún momento no los han dejado sólo. Y es que no sólo han empleado la palabra y han buscado el diálogo en su lucha para la calidad e identidad de la educación balear, sino que han pasado de las palabras a la acción. Una acción nada cómoda puesto que hacer huelga a lo largo de un mes equivale a dejar de percibir el salario que se tiene atribuido por el trabajo que hace. Y para los padres, toda una capacidad de reorganización familiar cuando los a ellotes restan en casa.
La acción social contra el Decreto Bausà de trilingüisme es, en su mismo planteamiento un error, un disparate pedagógico. Es del todo imposible un aprendizaje no jerarquizado de lenguas. Evidentemente que la escuela y el instituto tienen que facilitar y bien el conocimiento de idiomas, pero este objetivo pide una lengua base, la primera de escuela. Es como un edificio que necesita fundamento sólido y, en el caso del aprendizaje plurilingüe, este sólo puede ser la lengua baso de aprendizaje de la escuela que es el catalán., la natural, la propia y el oficial de las Islas.
La particularidad más oscuridad del Decreto del gobierno Balear es que establece la obligación de aprender catalán, castellano e inglés en p0artes y horarios iguales.. Y de cada uno de estos idiomas hacer lengua vehicular de enseñanza.
Tantos maestros saben y dominan la lengua de los ingleses a las Baleares ? Según las estadísticas de la misma consejería, muy pocos. Pero cuenta!. Cuando un maestro o profesor no posea la competencia adecuada para enseñar inglés o en inglés , entonces tendrá que hacer las materias que corresponda en castellano. El efecto total del enfoque establecido está claro: la marginación descarada del catalán. Objetivo diáfano y sin tapujos del gobierno de Baleares y Pitiüses, siguiendo las directivos de Madrid, calle Génova, está claro.
Y hay que reconocer que los maestros han liderado, incluso por ante el políticos, la causa de una escuela al servicio del ciudadano, del país y de calidad. Y cómo hemos indicado, la comunidad educativa ha dado legitimidad a la oposición al mencionado Decreto.
Han marcado el camino para lograr un cambio a la práctica a favor de los alumnos y de las escuelas, del país. Es, pero, el camino inequívoco que trae a la insumisión.
Y ahora, en casa nuestra, ¿ qué habrá que hacer ante la nueva Ley Wert que propone medidas que perjudican fuertemente el catalán y el modelo educativo propio de Cataluña la Escuela Catalana?
Será del todo imprescindible que se patentice una oposición social clara y firme a la Ley . No podemos dejar sólo los políticos en la oposición a la Ley Wert. No es una cuestión sólo política, es una cuestión de todo un pueblo.
Y por lo tanto, qué tendrán que hacer los maestros y profesores, las escuelas e institutos en general ? nos podemos preguntar. La respuesta sale espontánea, aplicar la normativa de Generalitat y los criterios que se dicten . Cómo hemos visto la actitud y la acción de los docentes y padres y madres de alumnas de las Islas ha sido ejemplar, toda una lección de pedagogía necesaria y oportuna en este momento histórico.
En último término, como ellos mismos hacen, habrá que pasar de largo de la Ley del gobierno central y aplicar una insubnissió generalizada en los centros escolares, si el despliegue que puede de hacer la Generalitat, no sirve por paloliar el agravio de la norma del señor Wert.
Comentarios