-
-

lamalla.cat

La ruta de las ermitas de Collserola

La tradición eremítica de la sierra de Collserola ha legado fuerza esglesioles de estilo románico por toda la extensión del parque. La ubicación de cada una de ellas evoca los tiempos antiguos en que los traginers utilizaban estos caminos, hoy en día frecuentados por excursionistas y amantes de la natura. Una de las vías lógicas entre Barcelona y Sant Cugat del Vallès pasa por cuatro de aquellas históricas ermitas: Santo Genís de los Agudells, Santo Cebrià, Santo Medir y Santo Adjutori. El camino, largo y con desniveles muy variados, resigue partes del PR-C 38 y del GR 6 y recorre el bucólico valle de Gausac, donde también se pueden ver un horno ibérico y el monumental pino de en Xandri.

El valle de Gausac es el nombre por el cual se conoce el valle surcado por la riera de Santo Medir. Se trata de una vía natural entre Barcelona y Sant Cugat del Vallès, que durante siglos fue muy concurrida. De hecho, formaba parte de la vía romana entre Barcino (Barcelona) y Castrum Octavianum (Sant Cugat), que se alargaba hasta Egara (Terrassa). Este recorrido se puede hacer de manera guiada con los voluntarios de Collserola.

Santo Genís de los Agudells

El punto de partida de la excursión es la misma parada de metro del Valle de Hebrón (línea 3). Tomamos la avenida de Jordà, bordeando los límites del Hospital de Santo Rafael, hasta llegar a la iglesia de Santo Genís de los Agudells. Fue una de las diez parroquias iniciales de Barcelona; su acta de dotación como parroquia data del año 931, a pesar de que su origen podría ser paleocristià. El año 1359 pasó a depender del monasterio del Valle de Hebrón, y al siglo XIX de la parroquia de Huerta. El edificio que se puede ver hoy en día responde, en gran medida, a la restauración del siglo XVII y todavía mantiene el primitivo cementerio. Desde el templo, hay que seguir por el camino de Santo Genís hasta el final, de donde sale un sender cerrado a la circulación. Un golpe cogida cierta altura, el trayecto se mantiene planer, resiguiendo este vertiente sur de Collserola. Después de pasar por la fuente de la Cabra, podemos ver la ermita de Santo Cebrià de Huerta, construida en el siglo XII, pero con importantes transformaciones a lo largo de los siglos XIX y XX. Desde aquí empieza la ascensión más dura del itinerario, que continúa por un corriol en dirección a la carretera de la Arrebatada.

Santo Medir

Poco después, la pista enlaza con el PR-C 35 y el GR 92 hasta el cerro de la Magarola, otro mirador excelente, y el paso del Rey, el cuello que remite siguiendo el GR 6 hacia la vertiente septentrional de la sierra. Pronto, hay que dejar las marcas rojas y blancas por un camino a la izquierda que baja con fuerza en dirección a Santo Medir, ermita situada junto a la riera del mismo nombre, a la cabecera del valle de Gausac. Esta es una de las iglesias más conocidas de Collserola y cada 3 de marzo secelebra un popular encuentro. Está documentada desde el siglo X y el edificio actual es de estilo románico, de planta rectangular y campanario de doble espadanya. Destaca el portal de punto redondo a la fachada principal, encima del cual hay un relevo gótico que representa la Santísima Trinidad.

La ermita de Santo Adjutori
A partir de Santo Medir el itinerario es muy sencillo, puesto que sólo hay que seguir las marcas del PR-C 38 primero, y del GR 6 después, resiguiendo la riera a través del valle de Gausac. La tendencia es descendente y sólo hay que desviarse un centenar de metros a mano derecha para contemplar la ermita de planta redonda de Santo Adjutori y, bien cerca de ella, un horno de la época romana, a pesar de que su datación no ha sido definitivamente establecida.

Esta es una de las escasas iglesias de planta redonda de todo Cataluña, en un estilo de inspiración bizantina muy poco común a nuestro país. A pesar de que sedesconocen los detalles y el momento preciso de su construcción, es probable que la ermita fuera andamio a partir de los fundamentos de un edificio anterior (seguramente una torre defensiva que ya presentaba planta redonda). Documentada desde el año 986 como Santa Maria de Gausac, en un principio estaba consagrada a la Virgen María del Bosque. Fue descubierta nuevamente en 1880, después de que seperdiera el rastro a partir de la desamortización de 1835.

El pino de en Xandri

El camino se convierte en pista a partir de Can Borrell, una masía que acoge un restaurante y está rodeada de campos de cultivo, en contraste con los húmedos y cerrados bosques recorridos hasta este momento. La vegetación es más abierta hasta llegar al monumental pino de en Xandri, un árbol que hace 23 metros de altura y tiene más de 230 años de edad. Una vez nos encontramos en este punto, se reconoce perfectamente el perfil de Sant Cugat delante, mientras que a cierta distancia a la izquierda se levanta la llamada Torre Negra. Este edificio militar románico fue construido en el siglo XII y tiene el origen en un antiguo castillo. Presenta una planta cuadrangular y tres pisos de altura, además de una torre adosada en un ángulo. A la cabeza de pocos minutos, llegamos a la plaza del Rotary Internacional, que es el punto final del itinerario.

Archivado en:

Comentarios