La Asociación Santo Rebrote por el Arte inauguró ayer jueves, día 4, en su sede de la calle Bonaire, la exposición Encuadres, una selección de una treintena de acuarelas y dibujos del artista mataroní Josep Noé. Las obras de Noé muestran paisajes, buena parte de los cuales de varios lugares de la geografía catalana, y reciben el nombre de Encuadres en honor a la afición que ha cultivado el artista por la fotografía. Planteo los cuadros como encuadres fotográficos, resumió el pintor durante la inauguración.
Este artista mataroní, de 74 años, mantiene una larga vinculación con la Santo Rebrote, puesto que participó en la primera edición de la Colectiva (en 1946, cuando tanto sólo contaba con 14 años). Noé, amigo y discípulo de Jordi Arenas, estudió en la Escuela de Artes y Oficios, como la mayoría de mataronins de la época con inquietudes artísticas. Después de un par de exposiciones individuales, Noé contrajo matrimonio en 1958 y cambió los pinceles por la máquina fotográfica. No fue hasta la jubilación que recuperó la afición por las acuarelas. Haya poca trabajo de natural, utilizo la cámara, tomo apuntes de color, y el resto lo hago al estudio, explicó Noè.
Sin grandilocuencias
. El presidente de la Asociación Santo Rebrote, Antoni Luis, destacó la aparente sencillez de las obras de Noè. Demuestra una gran técnica y dominio de la acuarela, que acostumbra a poner nerviosos a muchos artistas, dijo. Luis definió el artista como una persona modesta, que evita la grandilocuencia en sus cuadros. A sus obras, nadasobra y nadafalta, apuntó. Además, destacó que Noè tiene mucha obra hecha, pero es poco proclive a mostrarla. No como otros muchos, que con cuatro pinturas hechas ya se obsesionan al exponerla. Zoco muy crítico conmigo mismo añadió Noé-, cuando trabajo sufro, y no estoy satisfecho hasta que no doy por acabado el cuadro.

Josep Noè (izquierda) con Antoni Luís
Comentarios