Los exdirigents de Caja Laietana tiran pelotas fuera

Esta semana han empezado las intervenciones de los responsables de Caja Laietana y Bankia a la Comisión de Investigación del Parlamento de Cataluña sobre cajas de ahorro. Pere Antoni de Dòria, exdirector general de la entidad, fue el primero al responder a las preguntas de los diputados, y sus explicaciones quedaron muy lejos de convencer a nadie. Según Dòria, la gestión de las preferentes ha sido todo culpa de Bankia, una entidad -hay que recordar- a la cual se adhirió Caja Laietana mediante la famosa fusión fría, y se sacó cualquier tipo de responsabilidad de sobre. Tanto de la entidad mataronina como nivel personal. Que las preferentes fueran un producto rentable, como defendió, no significa que dejara de tener unos riesgos que se omitieron a jubilados, parados y otros tipos de personas alejadas del clásico perfil contratante de productos de riesgo. Que se esté recuperando la inversión gracias al arbitraje tampoco significa que sea gracias a él, más bien al contrario. Y que su única responsabilidad en todo esto haya sido “no prever la crisis” suena a broma de mal gusto. El peor de todo, pero, es que durando casi dos horas, Dòria fue incapaz de pedir perdón.