El presidente del Patronato de Cultura, Jaume Graupera, ha confirmado que las pandillas de la ciudad ensayarán de nuevo a Can Marfà hasta de aquí dos meses, cuando está previsto que se pueda empezar a usar uno de los buques grandes que está construïnt la Casa de la Múisca Popular a la calle alcalde Abril. Tendrán que hacerlo, eso sí, con un horario más limitado que antes y que tendrá que ser comunicado con anterioridad a la dirección del Patronato: "Teníamos un problema no resuelto pero mientras los buques no esté construidos haremos esto", ha comentado Graupera. "La música forma parte del patrimonio festivo de la ciudad y es obligación nuestra velarla", ha añadido.
El anuncio de Graupera llega después de que jueves día 7 los músicos de las pandillas se manifestaran pasadas las ocho del anochecer ante el Ayuntamiento, durante la celebración del pleno del mes de abril. El lunes anterior los músicos de las pandillas se habían reunido con el director del Patronato, Rafa Milán, y el día siguiente de mutuo acuerdo con Graupera se decidió tomar la decisión anunciada, que se comunicó el mismo martes a los músicos. Estos, de todos modos, mantuvieron la convocatoria de jueves para presionar Graupera. Finalmente, cuando los músicos se concentraron ante el Ayuntamiento, Graupera fue a recibirlos y se constituyó una comisión con un miembro de cada pandilla con la cual el presidente del PMC se comprometió a que pudieran recuperar Can Marfà como local de ensayo.
Los músicos de las pandillas tuvieron que dejar de ensayar a Can Marfà hace dos años y medio debido a las quejas por el ruido que hicieron los vecinos. Durante este tiempo los músicos han ensayado parcialmente en la escuela Joanot Martorell, pero ahora, desde los pases Santos, no han podido tocar juntos una sola vez.
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