El arquitecto mataroní Lluís Grau y Molist es el responsable de dos promociones de vivienda social hechos hace más de 10 años y que son ejemplos que la apuesta por la sostenibilidad y el diseño ejemplar de viviendas no es una decisión sólo aplicable a gran promociones de decenas de metros cuadrados. Al contrario. Los edificios de Grado son estudiados y, curiosamente, han traído a Mataró delante y dentro de edificios de protección oficial a estudiantes franceses cautivados por la aplicación en vivienda de promoción públicos de criterios de alta sostenibilidad. En la calle de Teià y en la calle de Menéndez Valdés, PUMSA impulsó des promociones de pisos que son ejemplares cara afuera y por cómo laten puertas adentro. "Se mujer la circunstancia que son más reconocidas afuera que no en Mataró estas promociones de vivienda pública que son ejemplo de cómo con menos recursos los edificios pueden ser igualmente sostenibles", explica Grado.
Grau constata que las dos promociones enseñan "que hay vías por la sostenibilidad en arquitectura para todo tipo de pisos" y reivindica que "a diferencia otros casos, en estos vemos que han funcionado la mar de bien". Por el arquitecto los puntos fuertes de esta doble promoción es que "son apuestas cuidadosas en el diseño exterior y que respiran el mismo por dentro" y reivindica que las políticas de promoción pública de vivienda y de pisos sociales "siempre tendrían que tener presente el entorno, para quien están pensadas, como pueden funcionar" en un tipo de estudio social que sea previo al arquitectónico y que permita que el resultado satisfaga las necesidades.
La sostenibilidad de sendas promociones firmadas por Grau se demuestra en que, por ejemplo, los habitantes de la calle Teià no pagan recibido de la electricidad porque el edificio la genera. "El objetivo de la sostenibilidad es doble, que cueste poco al usuario y que también cueste poco en el planeta. Por eso apostamos por ejemplo por la geotèrmia, que aprovecha la inercia térmica de los hormigones con los que trabajábamos, incluso en las cocinas. Si sumas a la geotèrmia la captación social ya tienes la clave de la sostenibilidad: calientas en invierno y enfrías en verano sin huella ecológica".
La necesidad de adaptar normativa y código técnico
Lluís Grau ha escrito y teoritzat sobre como promover vivienda social, siendo cuidadoso con el entorno y las necesidades a las que va dirigidas. "En este país no hay bastante vivienda pública, no hay historia ni cultura, sólo ha pasado a batzegades en algunos casos y con malos resultados". En este sentido celebra que el que hace lustros era casi una mirada única y singular como la de la apuesta por la sostenibilidad que distingue las dos promociones reconocidas en Mataró poco a poco vaya convirtiéndose en un criterio aplicable al resto de promociones, mediante la normativa está claro.
El arquitecto mataroní, pero, ve España singularmente atrasada en todo el que sería la aplicación técnica de los criterios ambientales. "Tenemos una normativa europea que se impone y un código técnico derivado pero queda muy recorrido para hacer. Hace falta un impulso propio porque hasta ahora el que se ha hecho ha sido manllevar normativas, criterios y materiales norteños de Europa donde tienen ventaja de años pero también un clima totalmente diferente. Tenemos un marco normativo pensado por el frío cuando la gran problemática a todo el continente ahora es el calor", explica. Con voz autorizada, Grado reclama un "cambio de criterio a la hora de redactar las normativas" para adaptarnos al calor y denuncia que en este aspecto España no está haciendo los deberes "mientras Italia, Portugal y Francia ya se están moviendo".
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