Los Renacuajos vuelven a actuar después de la muerte de Mariona Galindo

El barrio de Las Santas-Matadero verá mañana sábado día 26 la primera actuación de los Renacuajos de Mataró desde el 23 de julio pasado, el día que pasará a la historia por el golpe a la cabeza que recibió la joven miembro de la pandilla Mariona Galindo y que le acabó originando la muerte el 4 de agosto pasado. La de mañana, enmarcada dentro de las fiestas del barrio, será también una actuación especial porque, fruto de la muerte de Galindo, los moratones empezarán a usar casco por sus enxanetes y aixecadors. No es pero la única actuación del fin de semana, porque el día siguiente día 27 los mataronins actuarán en Igualada. Tan en Mataró como la capital de la Anoia los moratones pretenden levantar construcciones de siete pisos.

Ayer jueves día 24 los moratones hicieron el primer ensayo a su local de la antigua escuela Joanot Martorell con los nuevos casco, acabados de llegar de la firma murciana que los produce. Antes de empezar se hizo una reunión con los padres de los niños para explicar de qué manera se usaría el casco, un elemento que parece llamado a familiarizarse con la tradición castellera. Según el capataz, Xevi Castellví, los más pequeños recibieron el nuevo objeto sin ningún tipo de temor: "Bien es verdad que la mayoría no acaban de entender porque sirven", apunta.

Castellví se ha felicitado del alta participación que se registró en el ensayo, con 250 personas, que se preveía repetir hoy viernes en un nuevo encuentro de entrenamiento: " hubo gente que bajó de donde está haciendo vacaciones para venir y en general se notó quehabía un ambiente de más unión que nunca", ha relatado.

Empezar "casi de cero"
El responsable técnico de los Renacuajos ha comentado que los días que están visquent los integrantes de la pandilla no son agradables y que, en estos momentos, el único planteamiento posible es empezar "casi de cero", haciendo castillos de siete, con la voluntad de volver a coger confianza, especial en la posición de dosos, donde se situaba la castellera muerta. Al assig de ayerasistieron tan los padres como las hermanas de Mariona Galindo, en un gesto que el resto de miembros de la pandilla consideran clave para no caer en el desaliento. "Lo tenemos que ir superando entre todos. El recuerdo de Mariona siempreestará pero tenemos que empezar la normalidad", ha apuntado Castellví.