Capgròs
El trabajador de Mataró Buzo Jose Antonio Lara, representante sindical de CCOO, tendrá que ser readmitido a la empresa, tal y cómo ha dictado un juez de Mataró. Según la sentencia del Juzgado Social número 2 de la capital del Maresme, las razones que esgrimió la empresa Corporación Española de Transporto, SLU, gestora de Mataró Buzo, no son suficientes para justificar que lo despacharan. Además el juez reconoce Lara como representante sindical, algo que la empresa le negaba. Este hecho comporta que, por su condición, Lara pueda escoger entre una indemnización o readmisión, y este ha optado para volver a su puesto de trabajo.
Lara fue despedido el mes de mayo de 2017. Según denunció el comité de empresa de Mataró Buzo, el despido se debió a una venganza por la tarea sindical de Lara en los últimos años. Desde el Comité, del cual el trabajador había sido presidente y del queseguía formando parte, se traían años denunciando la política laboral "abusiva y antidemocrática" de la concesionaria. Según los representantes sindicales, los conductores trabajan bajo una presión excesiva, con horarios imposibles de cumplir, que ponen incluso en riesgo la seguridad de los pasajeros.
La empresa niega que se lo despidiera por su actividad sindical, sino por una falta "muy grave", pero el juez entiende que no es motivo suficiente para despacharlo
Una serie de cuestiones que la empresa siempre ha negado categóricamente. Y no tan sólo la cúpula de la misma, sino otros trabajadores, que se negaron a reconocer el comité, tal y como manifestaron en un comunicado con medio centenar de firmas. Por su parte, el gerente de Mataró Buzo, Francesc Avellaneda, aseguró que el despido de Lara no se debía de en ningún momento a las reivindicaciones que había realizado como representante sindical, sino a un "procedimiento disciplinario" abierto contra el trabajador por falta muy grave.
El Juzgado Social número 2 ha admitido la demanda interpuesta por el trabajador, a través del gabinete jurídico de CCOO, y considera que el despido es improcedente. Según fuentes del sindicato, el juez ha entendido que las razones esgrimidas por la empresa para despachar Lara –que se negara a reunirse con la empresa y una falta de respecto a un superior- serían motivo de una falta menor, pero en ningún caso de despido. La sentencia también reconoce que Lara es representante sindical, una categoría que le otorga el derecho a ser readmitido (en el caso de un trabajador cualquiera, la cuestión se resolvería con una indemnización por despido improcedente). El trabajador, tal y cómo informan desde el sindicato, ha reclamado volver a su lugar de trabajo.
La sentencia lo reconoce como representante sindical y le permite, así, escoger entre una indemnización o ser readmitido. Lara opta para volver a su puesto de trabajo
La dirección de la empresa concesionaria de Mataró Buzo todavía no ha recibido, este martes por la mañana, la sentencia judicial, y por lo tanto ha declinado hacer valoraciones hasta que no la pueda leer y estudiar. Desde CCOO, por su parte, insisten que a la empresa hay un clima laboral "insufrible" además de "graves riesgos psicolaborals, que a veces han podido llegar a riesgos para los usuarios". También denuncian que "desde otros sindicatos" han presentado a las elecciones sindicales "familiares directas de la dirección, por así, desde la dirección, tener control sobre el comité de empresa y la plantilla". Ante todo ello, exigen diálogo con el Ayuntamiento para solucionar estos puntos.
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