Josep Maria Ferrer, miembro de la Fundación Vilaseca, de Òmnium Cultural y del Club de Opinión Jaume Llevina, murió el pasado sábado día 25 a la edad de 80 años. Vilaseca, nacido en Barcelona en 1932 y afincat en Mataró desde muy joven, formó parte del núcleo fundador de estas dos entidades. En el caso de la Fundación Vilaseca, Ferrer fue una de las personas clave en la labor de la entidad de perpetuar el legado del género de punto en Mataró a través de la recuperación y restauración de la maquinaria de tejer y confeccionar, además de piezas y complementos textiles. Ferrer también fue uno de los impulsores del proyecto del Museo del Género de Punto, pendiente todavía de instalarse en una de las naves de Can Marfà.
Ferrer participó activamente en la vida social y cultural de la ciudad. Fue secretario del Grupo de Opinión Jaume Llevina, fundado en 1990, y anteriormente había participado en la creación de la delegación mataronina de Òmnium Cultural, entidad de la cual fue tesorero. Además, formó parte de la Junta Directiva de la Asociación de Antiguos Alumnos y Amigos de la Escuela Santa Anna, y participó en los actos de homenaje a la figura de Josep Puig y Cadafalch por su centenario.
Lee la necrológica de Josep Maria Ferrer que ha escrito Manuel Cusachs
