Muriel Casals, nada sin medida

Incluso aquellos quepodríamos decir adversarios políticos o dialògics no se ha estado de prodigar elogios a la presidenta de Òmnium Cultural y diputada de Juntos por el Sí en el escaiença de su traspaso.

Su semblante físico, que podía mostrar una cierta debilidad, escondía una fortitud de espíritu y capacidad de trabajo extraordinarias. Presidenta de Òmnium Cultural señaló el rumbo de la asociación que había que emprender con objeto de hacer realidad el sueño de tantos catalanes para lograr la plena soberanía de nuestro pueblo.

Le correspondía a Òmnium Cultural emprender este camino?

Si la divisa de la asociación que presidió dice: lengua, cultura y país, puede haber más garantía de libertad para la lengua y cultura propias que la plena soberanía política que no sea la independencia?

Cuántos anhelos no logrados para el catalán, cuántas frustraciones hemos tenido que sufrir para la cultura y para el país en general dependiente delEstado español?

Su liderazgo desde Òmnium Cultural ha sido reconocido por la sociedad como lo demuestra el número de socios que la asociación ha logrado, cincuenta y cuatro mil a lo largo de los años de su presidencia.

Muriel, nacida en Aviñón, hija de exiliados, ha sido una mujer en constante transformación, una mujer con capacidad negociadora a todos niveles y admirada por su medida nunca estridente pero eficaz como ninguna otra. De comportamiento amable, ha acontecido la sonrisa de la revuelta del pueblo catalán verso su liberación.

Liberación cumplida, nacional y para una sociedad justa. Siempre disponible al servicio de la nación. " Queremos lograr un sueño, pero el sueño ya lo somos nosotros ", había dicho.

No es frecuente en la sociedad y, concretamente en el mundo político, tanta coincidencia al valorar la tarea y el servicio de una persona como se ha acontecido con esta da extraordinaria con el cual hemos podido compartir los momentos más gloriosos de nuestro proceso de liberación nacional con las dificultades y trabas que ha comportado.

Ella, pero, sin defallença ha afanado con un comportamiento que tenido por premisa la frase escrita por los clásicos " Nada sin medida " Pero todo por Cataluña y su lengua y su cultura y el bienestar de su gente.

Que la tierra le sea leve. Deja, pero, el recuerdo y el ejemplo imborrables en el espíritu de todos los hombres estiman la justicia y la libertad.