Capgròs publicaba recientemente una noticia con el siguiente titular: "ERC aspira a movilizar los descontentos con Bote y el PSC para lograr la alcaldía a Mataró", raíz de un almuerzo convocado por el partido independentista con algunos periodistas locales. En la noticia se recogían algunas declaraciones de en Pim Camprubí, que será el cabo de lista de ERC en las próximas elecciones municipales a nuestra ciudad, que tendrán lugar dentro de trece meses. Camprubí afirmaba que ERC es "una corriendo central que unifica muchas sensibilidades de la ciudad" y que tienen como objetivo "hacer el sorpasso y que el próximo alcalde no vuelva a ser del PSC". Obviamente, a nadie se le escapa que la precampaña para las municipales ya ha empezado y que las diferentes candidaturas tienen que ir tomando posiciones y tirando mensajes a sus potenciales electores. Y en este marco hay que situar las declaraciones de Camprubí, un candidato todavía bastante desconocido en la ciudad.
La cuestión que pretendo abordar en este artículo, datos en mano, es si realmente ERC es un partido que representa una "corriendo central" a la ciudad e intentar describir la homogeneidad que presenta su apoyo en los diferentes barrios de Mataró. El que he hecho, en primer lugar, es recuperar los porcentajes de voto por barrios de las diferentes candidaturas que se presentaron a las elecciones municipales del año 2019, que tenemos aquí:
Porcentajes de voto por barrios (Municipales 2019 a Mataró)
Cómo podemos ver, el PSC obtiene su porcentaje más alto (58,69 %) a Cerdanyola Sur, mientras que el más bajo (14,03 %) lo recibe en el Centro. En el caso de ERC pasa exactamente al revés: el porcentaje más alto lo consigue en el Centro (44,35 %) mientras que el más bajo lo obtiene a Cerdanyola Sur (10,05 %). Las diferencias entre los porcentajes más altos y los más bajos, cómo podemos ver, son muy elevadas, es decir, dependiendo del barrio el apoyo recibido es muy diferente. Y cómo podemos observar, el comportamiento es muy diferente si comparamos los resultados del Centro y el Ensanche con los de los barrios que hay fuera de rondas a la ciudad. En común Podemos Mataró es la candidatura que presenta unos porcentajes más homogéneos, sin diferencias muy exageradas entre barrios. El caso de los partidos independentistas es paradigmático: reciben los porcentajes de voto más elevados al Centro y el Ensanche, pero en los barrios periféricos estos apoyos caen de forma estrepitosa. Nada que ya no sepamos y que no se dé habitualmente también en otros comicios, sobre todo durante los años del Proceso, en que el conflicto identitario ha polarizado (todavía más) el voto.
Ahora compararemos el porcentaje más alto conseguido por cada candidatura con el más bajo. Podríamos hacer simplemente un resto entre ambos porcentajes, pero al estar analizando datos porcentuales (por lo tanto, no absolutas) de candidaturas con porcentajes de voto muy diferentes, nos será más útil usar otro método: calcular el peso del porcentaje más bajo en relación con el más alto. Los resultados son los siguientes:
Porcentajes de voto más altos y más bajos por barrios (Municipales 2019 a Mataró)
Elaboración propia a partir de datos de: Servicio de Sistemas de Información y Telecomunicaciones del Ayuntamiento de Mataró. (2019)
Un golpe tenemos estos datos, nos será muy útil visualizar en un gráfico el peso que representa el porcentaje más bajo respecto del porcentaje más alto de las diferentes candidaturas. Aquí lo tenemos:
Según estos datos, podemos observar cómo En común Podemos Mataró presenta, con diferencia, el dato más alto (un 71,12 %), cosa que indica que es la candidatura con diferencias más bajas entre el apoyo más elevado y el más bajo en los diferentes barrios, es decir, tendría un apoyo con una homogeneidad más elevada en toda la ciudad. Por el contrario, Primarias es quienes tiene un dato más baja (un 1,67 %), cosa que indica que el porcentaje de apoyo más alto que recibe está muy alejado del más bajo. Podemos observar cómo C's, PP y Vox presentan datos por encima del 30 % (muy lejos, eso sí, de la de En común Podemos), y son los partidos independentistas (ERC, CUP, JxM y Primarias, por este orden) los que tienen datos más bajos, es decir, el apoyo que reciben es poco homogéneo por barrios (hay barrios donde reciben bonos resultados -Centro y Ensanche, básicamente- y otros donde estos son bastante más reducidos). El PSC presenta un dato del 23,91 %, cosa que confirma que, cómo le pasa a ERC, existe una diferencia muy grande entre aquel barrio donde consigue un mayor porcentaje de voto y aquel barrio en que consigue el más bajo. Por lo tanto, los dos grandes partidos de la ciudad no consiguen buenos resultados a toda la ciudad, sino que lo hacen en barrios concretos.[banner-AMP_5]
A continuación, presentamos algunos estadísticos básicos un golpe analizados los porcentajes de voto a los diferentes barrios, que nos servirán para representar unos útiles diagramas de caja:
Estadísticos básicos respecto de los % de voto por barrios (Municipales 2019 a Mataró)
En estos diagramas de caja se puede observar claramente las diferencias entre los porcentajes de voto más altos y los más bajos (hay que mirar la diferencia entre el dato mínimo, representada con un cuadrado rosa, y el dato máximo, representada con un triángulo verde). El caso de En común Podemos Mataró, cómo se puede ver, presenta porcentajes de voto bastante homogéneos a los diferentes barrios de la ciudad. Los casos de los partidos independentistas, y también del PSC, presentan diagramas de caja muy "largos", porque la diferencia entre porcentajes de voto son muy elevadas. Vivimos todavía en una ciudad "dual", como mínimo en cuanto a los votos en unas elecciones municipales? En parte sí, indudablemente.[banner-AMP_6]
Qué quiere decir todo esto? Cuando Pim Camprubí dice que ERC es "una corriendo central que unifica muchas sensibilidades de la ciudad", entendemos que se basa en una percepción absolutamente subjetiva y no en los datos, porque ERC consigue buenos resultados a determinadas zonas de la ciudad (Centre y Ensancho principalmente), pero no consigue penetrar bastante en los barrios periféricos. El caso del PSC es exactamente el opuesto, si bien es cierto que los resultados de los socialistas en las últimas elecciones municipales fueron muy mejores que no los de los republicanos, especialmente espectaculares a algunos barrios, cosa que los permitió obtener cinco regidores más. Además, será muy complicado para los republicanos pedir el voto a determinados barrios, sobre todo aquellos de rentas más bajas, cuando se percibe que solo los interesa la "cuestión independentista" y, por ejemplo, votaron en contra de la reforma laboral liderada por Yolanda Díaz, que ya está sirviendo para aumentar espectacularmente la proporción de contratos indefinidos a todo el país, una cuestión material que se nota especialmente a los bolsillos y las condiciones de vida de la gente.[banner-AMP_7]
Qué pasará en las próximas elecciones municipales? No lo podemos saber, porque el trabajo de los politólogos no consiste al averiguar el futuro, pero el que podemos ser capaces de prever es que los diferentes partidos tendrán que pactar para conformar un nuevo gobierno municipal, puesto que seria muy sorpresivo que hubiera una mayoría absoluta, más teniendo en cuenta que es probable que el consistorio esté más fragmentado que en el presente mandato. El objetivo de ERC es ser la fuerza más votada, hacer el sorpasso al PSC y así estar en mejor disposición para hacer de en Pim Camprubí el primer alcalde de ERC después de muchas décadas.[banner-AMP_8]
El hito se presenta altamente complicada, en primer lugar porque el trasvase de voto entre ambas formaciones es muy bajo, según diferentes estudios. El que está claro es que David Boto no lo tendrá fácil para revalidar los trece regidores del 2019, debido a diferentes factores de los cuales son perfectamente conocedores en la sede del Camino de la Giganta, y que precisarían de un artículo entero para abordarlos con un mínimo detalle. El papel de formaciones cómo En común Podemos, la candidatura que con diferencia presenta unos resultados más homogéneos a toda la ciudad (datos en mano, solo Sergi Morales podría hacer aquella afirmación de Camprubí según la cual la candidatura es "una corriendo central que unifica muchas sensibilidades de la ciudad"), puede ser determinante, porque es la única capaz de romper los bloques identitarios que, desgraciadamente, hace demasiado tiempo que a nuestro país se han constituido de facto. Y quizás es la única candidatura que, con determinados resultados, podría estar en disposición de decidir si el alcalde tiene que ser Boto o en Camprubí. Todavía quedan muchos meses y la situación política, local y general, dará muchas vueltas y seguramente depararà alguna sorpresa destacada. Los partidos mataronins, pero, no pueden dormirse y ya tendrían que tener su maquinaria a pleno funcionamiento, sobre todo si quieren mejorar porcentajes de voto a aquellos barrios donde consiguen sus peores resultados.[banner-AMP_9]