UD Molinos, 200 niños en un campo de arena

La UD Molinos no se benefició del Pacto por el Fútbol, firmado entre clubes y Ayuntamiento de Mataró para renovar los campos municipales e instalar césped artificial, entre otros acuerdos. En aquel momento (año 2006), los blanco y moratones contaban con un equipo sénior y poca cosa más, por el que no tenía sentido que el Municipal Ver Alegre se renovara con una instal•lació de cerca de 600.000 euros. Dos años más tarde, pero, varios ex-jugadores de la entidad entraron a la directiva del club para recuperar la escuela de fútbol base. Actualmente, seis años después, la base cuenta con unas 200 fichas que siguen jugando en un campo de arena, el único municipal así en Mataró y probablemente en el Maresme. Ahora reclaman un campo en mejores condiciones.

David Morales, secretario de la entidad, explica que se encuentran en "desventaja con los otros clubes", tanto para captar niños  como la hora de competir,  y que ya tenían acordado con el PSC "instal•lar el césped esta legislatura, pero cómo que no ganaron tuvimos que empezar de cero la negociación con el nuevo gobierno". Esto atrasó un proyecto que han habido "de enseñar muy bien otra vez: cómo trabajamos, qué hagamos, etc. Para explicar la realidad de nuestro día a día". "Desde que empezamos una nueva etapa el 2008 la escuela ha ido creciendo hasta los 200 jugadores actuales", añade Morales, que recuerda que el coste de instalar el césped ya no es tanto elevado: "El último presupuesto que hicimos era de 315.000 euros, y hay campos como el de Calella o la Salud Pere Gol que se han hecho con menos de 300.000 euros".

El club trabaja con el Ayuntamiento desde el primer día, y consideran que la administración local tiene "buena predisposición, sobre todo cuando cogió las riendas del tema el propio alcalde [Joan Mora], puesto que los hemos intentado convencer del trabajo constante que estamos haciendo con la base". El club hará 50 años el cercano 2015, y los gustaría llegar a la cifra con unas instal•lacions renovadas, y no las mismas de cinco décadas atrás. La idea de jugar en otro campo como el del Rocafonda, que tiene césped y horarios libres, tampoco parece una buena solución: "Tenemos el bar, que nos financia buena parte de la temporada puesto que lo gestionamos nosotros, y si enviamos equipos a otros campos no entrarían ingresos vitales por el día a día".

Voluntades del Ayuntamiento
El alcalde, Joan Mora, ya aseguró durante la Audiencia Pública que en este 2014 había "la voluntad" de salir adelante la instal•lació del césped artificial al campo de los Molinos, y de hecho está prevista una reunión con el club por este mes de diciembre para tratar el tema. Por otro lado, el PSC introdujo un ruego en el Pleno de noviembre en el cual se pedía dar un paso adelante en la instalación del césped. Los socialistas ya han defendido en reiteradas ocasiones que la situación del 2006, cuando se pactó el césped a la mayoría de campos municipales y los Molinos no tenían base, es totalmente diferente al actual y que hay que actuar en consecuencia.