Una escuela de Mataró, con legionela desde hace tres cursos

Una lucha que se ha dejado ya por imposible. La escuela Maria Mercè Marçal de Mataró trae desde junio de 2016 donante positivo en las analíticas de legionela a su circuito de agua caliente. Se ha intentado de todas las maneras posibles acabar con este brote, pero sigue reapareciendo, cosa que ha impedido durante todo este tiempo a los alumnos de este centro del Camino de la Serra poderse duchar en la escuela. El consistorio ha decidido finalmente cambiar el circuito de agua, operación que costará 114.000 euros.

El pasado 14 de noviembre el alcalde, David Boto, y el regidor de Educación, Miquel Àngel Vadell, se reunieron con la comunidad educativa de la escuela, inaugurada en 2009, para anunciar la sustitución de toda la instalación de agua. Los trabajos se llevarán a cabo el próximo verano y se espera que acaben de una vez por todas con la problemática. El brote apareció el junio de 2016, cuando una analítica dio positiva en legionela al circuito de agua caliente de la escuela.

En aquel momento, según informa el Ayuntamiento, se llevaron a cabo los tratamientos indicados por el Ministerio de Sanidad, y a la vez se instaló una red provisional paral·leloa que podía hacer llegar agua potable a la escuela. Esta red ha sido la que ha acabado dando servicio en la escuela desde entonces. A pesar de que en un primer momento la legionela no apareció más en los controles, a la cabeza de un tiempo, en verano de 2017, volvió a dar positivo. Desde entonces, ni los continuos tratamientos realizados ni las modificaciones que se han ido ejecutando en la red de agua han conseguido erradicar la presencia de la legionela. Por culpa de esto las duchas no se pueden utilizar, pero si todos los otros dispositivos.

El Ayuntamiento ha empezado a redactar el proyecto de renovación total de la instalación de distribución de agua, incluyendo la sustitución de todos los grifos para eliminar cualquier elemento que pueda estar contaminado. Se prevé que las obras tengan un coste de 114.000 € y que puedan ejecutarse en verano de 2019, durante las vacaciones escolares.