Usuarios de l’emprendida Casas, descontentos con los cambios a la línea C2

Usuarios de la empresa Casas no están conformes con la nueva ubicación de la parada que la línea C2 hace en el barrio de Cerdanyola. Desde el pasado 6 de abril, los autobuses de esta línea, que conecta Mataró con Barcelona, ya no paran a la avenida de la Gatassa sino a la otra banda del parque de Cerdanyola, al paseo de Ramon Berenguer, en una parada sin marquesina. Los usuarios se quejan por las molestias que los supone esperar bajo la lluvia cuando llueve, y denuncian también que la carencia de un asiento obliga a la gente mayor o a las embarazadas a esperar de pie derecho. Por este motivo, un grupo de viajeros han hecho llegar sus quejas a la empresa y han iniciado una recogida de firmas para pedir mejoras en un servicio que ahora consideran "deficiente". En la carta que han dirigido a la empresa Casas, piden una mejora de la parada y sugieren ubicaciones alternativas.

En el mismo escrito, además, advierten que en la línea C2 "no hay servicio suficiente por la cantidad de gente que lo utiliza". Según explican, los usuarios que cogen el tren a las 730 tienen que hacer cola media hora antes si no quieren viajar derechos, y a la franja del mediodía sólo circula un autobús cada hora. Por eso, reclaman también un refuerzo de los número de autobuses en esta línea. "Creemos que ya hay demasiadas deficiencias en esta línea en concreto y que nos lo ponen cada vez más difícil para poder coger el autobús", afirman los usuarios en este comunicado.

Fuentes de la compañía han explicado que el cambio en la línea C2 está motivado por la acumulación de autobuses que tiene lugar a la parada de la Gatassa, por donde también circulan los vehículos del Mataró Buzo y del Barcelona Buzo que va a Granollers. Las mismas fuentes han asegurado que la empresa estudiará la posibilidad de instalar una marquesina en la nueva parada de Ramon Berenguer.