Los comerciantes y los vecinos de la Plaza Granollers están molestos por la instalación de cámaras en esta rotonda, consideran que sólo alimenta el afán racaptador del gobierno municipal. Las cameres son un sistema fascista de control y un sistema fácil y lavable para conseguir recaudar más dinero, puesto que el gobierno no piensa ampliar la plantilla de policías, asegura Joan Balaguer, propietario de la librería El Tranvía. Con estas cámaras el Ayuntamiento quiere evitar posibles accidentes de tráfico provocados por los coches que paran puntualmente a la rotonda. El consistorio nos da permiso para aparcar el carrilet de Navidad a la rotonda durante dos semanas de Nadal y, en cambio, considera peligroso que lo hagan los coches, explica Jordi Llargués, presidente de la Asociación de Comerciantes del Nuevo Parque, quien cree que el Ayuntamiento tenía que haber pedido la opinión de los vecinos de la zona antes de difundir esta noticia.
Los vecinos aceptan que en algunos momentos esta plaza está bastante saturada de tránsito, pero no consideran que las cámaras sean la mejor solución y menos todavía si se hacen previsiones de futuro. El Ayuntamiento dice que cuando haya la locomotora comercial situada entre la calle Biada y Ronda del General Delgado- el tránsito a la Plaza Granollers empeorará, lo cual confirma que este centro comercial no tendría que estar en esta ubicación, asegura Pep Sivilla, presidente de la Asociación de Vecinos Peramàs-Esmandies. Además, los vecinos creen que estas cámaras sólo son el primer paso para poner a otros lugares de Mataró.
Los afectados por estas càmares han creado una comisión para conducir las negociaciones con el gobierno municipal, pero, hoy por hoy, los regidores sólo ofrece acordar un horario de funcionamiento de las cámaras, ampliar las áreas de carga y descarga de la zona y establecer un tiempo de advertencia, pero no sancionador, a los conductores. Estas propuestas no convencen ni alivian, los problemas de los vecinos y de los comerciantes. En esta plaza hay mucha actividad: ambulancias de hospitales de día que recogen y dejan abuelos, mensajeros que traen documentos a los despachos, proveedores que descarguen productos en cada tienda, empresas que cada día por la mañana recogen aquí sus trabajadores... somos muchos los afectados, asegura el propietario de la librería El Tranvía, quien ya ha decidido cerrar los domingos, el día que vendía más diarios y revistas.
La próxima reunión de los vecinos y los tenderos para debatir las propuestas que los ha propuesto el Ayuntamiento será entre el 15 y el 20 de enero. Si no hay acuerdo se prevé realizar algunas acciones, por ejemplo, una recogida de firmas.
Los vecinos aceptan que en algunos momentos esta plaza está bastante saturada de tránsito, pero no consideran que las cámaras sean la mejor solución y menos todavía si se hacen previsiones de futuro. El Ayuntamiento dice que cuando haya la locomotora comercial situada entre la calle Biada y Ronda del General Delgado- el tránsito a la Plaza Granollers empeorará, lo cual confirma que este centro comercial no tendría que estar en esta ubicación, asegura Pep Sivilla, presidente de la Asociación de Vecinos Peramàs-Esmandies. Además, los vecinos creen que estas cámaras sólo son el primer paso para poner a otros lugares de Mataró.
Los afectados por estas càmares han creado una comisión para conducir las negociaciones con el gobierno municipal, pero, hoy por hoy, los regidores sólo ofrece acordar un horario de funcionamiento de las cámaras, ampliar las áreas de carga y descarga de la zona y establecer un tiempo de advertencia, pero no sancionador, a los conductores. Estas propuestas no convencen ni alivian, los problemas de los vecinos y de los comerciantes. En esta plaza hay mucha actividad: ambulancias de hospitales de día que recogen y dejan abuelos, mensajeros que traen documentos a los despachos, proveedores que descarguen productos en cada tienda, empresas que cada día por la mañana recogen aquí sus trabajadores... somos muchos los afectados, asegura el propietario de la librería El Tranvía, quien ya ha decidido cerrar los domingos, el día que vendía más diarios y revistas.
La próxima reunión de los vecinos y los tenderos para debatir las propuestas que los ha propuesto el Ayuntamiento será entre el 15 y el 20 de enero. Si no hay acuerdo se prevé realizar algunas acciones, por ejemplo, una recogida de firmas.