Capgròs
La verbena de San Juan de 2022 dejó una cicatriz profunda en la historia de una de las empresas sin las cuales no se puede concebir el sector de la horticultura y la jardinería en el Maresme y en Cataluña. Hablamos de Sabater y de su nave en Palafolls, víctima de un incendio devastador causado por un cohete que penetró por el techo de la nave y arrasó en pocos minutos todo un legado construido durante décadas. Pero lo que podría haber sido un final se convirtió en un nuevo comienzo. Ahora, un año y medio después, Sabater vuelve con fuerza, reafirmando su compromiso con la agricultura y la comarca del Maresme.
“Fue un golpe muy duro. Vimos cómo años de trabajo y esfuerzo desaparecían en llamas. Pero sabíamos que no podíamos rendirnos. Teníamos una responsabilidad con nuestros clientes y con el sector agrícola, y por eso actuamos rápidamente”, explican desde la empresa. En pocos días, el equipo de Sabater habilitó un punto de venta provisional en el lateral de la nave quemada, garantizando así el suministro de materiales esenciales para los agricultores de la zona”.
“En febrero de 2024 comenzaron las obras de reconstrucción de la nave de Palafolls. El objetivo era claro: recuperar el espacio perdido y mejorarlo. Un nuevo comienzo. Piedra a piedra, cimiento tras cimiento, levantamos una nueva nave para volver con más fuerza que nunca”, explican desde la empresa. Así se volvieron a construir 4.000 metros cuadrados con todo el material y accesorios de riego, complementos de jardinería, maquinaria agrícola y un taller de reparación. Siguen contando con su almacén de plástico para invernaderos y materiales de cobertura, preparados para dar servicio a la agricultura con la misma dedicación de siempre.
Una apuesta por el territorio y el futuro
La empresa Sabater ha sido un pilar fundamental del sector agrícola del Maresme desde 1903. Con más de 120 años de historia, ha evolucionado y se ha adaptado a los cambios tecnológicos y a las necesidades del sector. Desde su fundación como una ferretería especializada en herramientas para la horticultura en Mataró, ha ido creciendo y expandiéndose con la creación de nuevos modelos de cultivadores, máquinas para la recolección y sistemas de riego avanzados. A mediados del siglo XX, Sabater introdujo innovaciones como la mecanización de la extracción de patatas y la aspersión localizada, consolidándose como una referencia en el sector agrícola.
Con la incorporación de la cuarta generación familiar, la empresa ha seguido modernizándose, colaborando con centros de investigación y ampliando su gama de productos para dar respuesta a las necesidades de una horticultura cada vez más tecnificada y sostenible. Hoy en día, sigue apostando por la innovación y la proximidad con los agricultores, manteniéndose como un referente en el Maresme y más allá, desde su doble sede en Argentona y Palafolls. Esta última con un valor simbólico especial después de aquel fatídico San Juan.
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