Bote culpa a "extremistas" de alentar la violencia en el barrio de Cerdanyola

El alcalde de Mataró, David Bote, ha señalado los "extremismos" y en concreto el Sindicato de Vivienda (sin mencionarlo nunca de forma literal), como responsables de haber encendido los ánimos en el barrio de Cerdanyola y de alentar la violencia que ha estallado en los últimos días, en especial los disturbios de ayer lunes por la noche. En declaraciones a los medios este martes, Bote ha asegurado que “Estamos viendo distintas actuaciones de grupos políticos de un extremo y otro que viven del conflicto”.

"No hay lugar para la violencia en nuestra ciudad, no quedará sin respuesta"

El alcalde ha querido dejar claro que su gobierno no tolerará “sucesos vandálicos y delictivos en Mataró” y que ningún acto violento “quedará impune y sin respuesta”. “Resolvemos con firmeza. Actuamos policialmente para acabar con estos hechos delictivos”, ha dicho. Cuando se le ha preguntado por las causas de la oleada de vandalismo, más allá del suceso inicial (la detención de un okupa el pasado miércoles) que encendió la chispa, Bote ha señalado a personas y colectivos que “animan o alientan estas actitudes, a quienes pedimos que cesen inmediatamente su conducta”.

"Pedimos a los colectivos que alientan estas actitudes que cesen inmediatamente su conducta"

Bote ha vinculado directamente la escalada de tensión en el barrio con el movimiento por el derecho a la vivienda, que organizó una asamblea abierta ayer en la plaza Once de Septiembre, escenario de los disturbios más graves. “Vemos movimientos de ambos extremos, gente muy vinculada a la defensa de la política de la vivienda. Nosotros estamos en contra de la ocupación ilegal de las viviendas, no es la primera vez que tenemos un conflicto con ellos”, ha afirmado. El Sindicato de Vivienda ha denunciado en los últimos días la "violencia policial" ejercida según ellos en Cerdanyola, y desde el gobierno se percibe la asamblea de ayer como una forma de avivar el fuego para reavivar el conflicto que se vive en el barrio.

Los incidentes de este lunes, que se han producido tras un par de días de relativa calma, han implicado enfrentamientos entre jóvenes concentrados y efectivos de los Mossos y la Policía Local, con quema de contenedores y lanzamiento de objetos. Un menor ha sido detenido por desórdenes públicos y atentado a la autoridad. Una violencia que el alcalde no quiere que se normalice: “Cualquier acto de violencia y vandalismo está injustificado, quien lo quiera justificar de esta forma no tiene cabida en la ciudad”.

Bote ha manifestado que la fuerte presencia policial se mantendrá en el barrio

El dispositivo policial desplegado en el barrio se mantendrá activo en los próximos días. Bote ha defendido la labor de Mossos y Policía Local y ha afirmado que “la policía ha tenido un papel muy presente en el barrio estos días”, destacando el “diálogo permanente de los dos cuerpos” para garantizar la convivencia. En este sentido, ha puesto de relieve las detenciones, un total de seis, llevadas a cabo por ambos cuerpos policiales en los últimos días, vinculadas sobre todo a la quema de cerca de 25 contenedores.

El alcalde ha querido empatizar con el vecindario de Cerdanyola, trasladándoles un mensaje de tranquilidad. Ha asegurado que entiende su "angustia" y que el Ayuntamiento mantiene con ellos una interlocución constante. “Estamos trabajando para garantizar la convivencia. Los hechos delictivos ponen en peligro la convivencia y no tienen cabida en nuestra ciudad”. Y ha remarcado: “Tranquilidad de estar a su lado porque la ciudad quiere vivir en paz”.

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