Brutal agresión a un árbitro en un partido de fútbol base en el Maresme

Un árbitro fue brutalmente agredido el domingo 5 de octubre en el Masnou tras un partido de fútbol base entre el Atlètic Masnou y el CE Llinars, correspondiente a la categoría Alevín S11. Según ha trascendido, el agresor sería el padre de uno de los jugadores del equipo visitante, que presuntamente habría atacado al colegiado en el aparcamiento del campo una vez finalizado el encuentro. El árbitro tuvo que ser hospitalizado y se encuentra de baja laboral.

Los hechos, avanzados por el diario La Vanguardia, han provocado una ola de indignación y condena en todo el Maresme. Todos los clubes de fútbol de la comarca han hecho público un comunicado conjunto en el que expresan “la más firme condena y rechazo ante una agresión de una violencia intolerable” y recuerdan que el fútbol formativo “debe ser un espacio de aprendizaje, convivencia y respeto”.

#Comunicat conjunt dels clubs de futbol del Maresme: El futbol i l'#esport han de ser espais de #respecte, #educació, #tolerància i fair play. No permetrem que la violència i la intolerància destrueixin el veritable esperit de l'esport. "Protegir l'àrbitre és protegir l'esport". pic.twitter.com/ItFLqMFgG1

— U.E. Vilassar de Mar (@UEVilassardeMar) October 8, 2025

Como muestra de solidaridad, los clubes del Maresme han acordado realizar un gesto simbólico este fin de semana: durante el primer minuto de cada partido, los jugadores y jugadoras se sentarán en el suelo del campo en señal de apoyo a los árbitros y de protesta contra cualquier tipo de agresión o intimidación. La acción se repetirá en todos los campos del Maresme, y se invitará también a los equipos visitantes a sumarse. “Proteger al árbitro es proteger el juego”, afirman los clubes en el comunicado, que defiende un deporte “basado en el respeto, la tolerancia y el fair play”.

Por su parte, el CE Llinars, uno de los equipos implicados en el partido, ha condenado “enérgicamente” la agresión y ha anunciado que adoptará medidas disciplinarias contra el padre del jugador presuntamente responsable. El club ha pedido disculpas públicas “a todas las partes afectadas” y ha reiterado su compromiso con la deportividad y la convivencia.

El Comité Técnico de Árbitros (CTA) también ha emitido un comunicado condenando esta y otra agresión registrada el mismo fin de semana en Vitoria. El organismo califica los hechos de “deleznables e inadmisibles” y asegura que estudiará nuevas medidas para reforzar la seguridad de los colegiados en los campos de fútbol.

“El respeto y la protección de la figura del árbitro son esenciales para mantener la integridad del juego”, señala el CTA, que ha expresado su apoyo y solidaridad con los árbitros agredidos y se ha puesto a su disposición “para cualquier necesidad personal o legal”.

Los clubes del Maresme, unidos bajo el lema “Unidos por un deporte más respetuoso y seguro para todos”, reclaman tolerancia cero ante la violencia y hacen un llamamiento a familias, jugadores y aficionados para reconstruir un entorno deportivo basado en el respeto.