Capgròs
El Parque Forestal de Mataró se ha convertido en los últimos meses en un escenario habitual de 'botellónes'. Así lo denuncian los vecinos de las urbanizaciones del entorno, que la noche de sábado día 15 se encontraron de nuevo con dicha situación
La Policía Local y los Mossos d'Esquadra tuvieron que intervenir en dos ocasiones durante la noche y madrugada ante las quejas vecinales. La primera fue a las 23.25h, cuando recibieron una primera llamada por las molestias que generaba un grupo de personas a la zona del aparcamiento del Parque Forestal.
Al llegar se encontraron una gran concentración de vehículos y un numeroso grupo de personas bebiendo y con la música a un volumen muy elevado. Los agentes de la Policía Local posaron 16 denuncias por estacionamiento incorrecto e hicieron que los jóvenes se fueran del lugar.
Estos, pero, volvieron al cabo de pocas horas. Poco antes de las tres de la mañana la policía tuvo que acudir de nuevo porque varios vecinos volvieron a protestar por el alboroto que provenía del aparcamiento. Al llegar la policía se encontraron la misma escena que en medianoche; en este caso interpusieron 10 denuncias.
En los últimos meses, con las limitaciones establecidas a raíz de la pandemia (como por ejemplo el cierre del ocio nocturno) el Parque Forestal y sus entornos se han convertido en punto habitual de encuentro de jóvenes que quedan para beber al aire libre y hacer fiestas. También se ha convertido en lugar de prácticas muy peligrosas como por ejemplo carreras ilegales de coches. Hace pocas semanas se produjo un espectacular accidente donde un vehículo cayó por un terraplén de 15 metros de altura.
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