La Audiencia Provincial de Barcelona ha desestimado el recurso del CE Mataró y se reafirma en el que dictaminó el juzgado de primera instancia de Mataró: La entidad, junto con los ex-coordinadores Jordi Pino y Marcial Serrano, tienen que pagar a los ex propietarios del club (Oslo SL, vinculada a Paco Gonzalo) una cantidad cercana a los 50.000 euros (concretamente 45.600) y seguir pagando 1.200 euros al mes hasta el 2025 tal y como estaba establecido en un contrato mercantil firmado el 2011.
Todo esto bien de años atrás: Marcial y Jordi acordaron pagar 1.200 euros al mes a Paco Gonzalo a cambio de poder usar iconos, categorías y demés para mantener el club vivo. La federación validó el contrato y años después, el CE Mataró (con una nueva junta directiva) subrogó este acuerdo. Al 2014, el CE Mataró dejó de pagar al entender que el contrato era nulo. Gonzalo los demandó y el juez le dio la razón, puesto que las "tres partes condenadas habían sido pagando las cuotas entre 2011 y 2013 y pretender ahora la nulidad de un contrato después de haber cumplido con el mismo es ir en contra los actos propios más elementales". La Audiencia ratifica este argumento.
La situación es delicada por la entidad: a pesar de que la demanda se hizo reclamando 6.000 euros impagados, la sentencia en primera instancia alertaba: "no hay otra interpretación que la obligación de pago solidario de las cuotas objeto de reclamación y, en su caso, si se verifica, de las futuras que ya se anuncian impagadas". Significa que hay que pagar todas las otras cuotas no abonadas a posteriori. Entre 2014 y 2017 el total sube a 45.600 euros.
Naturalmente, como que la Audiencia Provincial confirma que el contrato es válido, habrá que seguir pagando los siguientes meses hasta que acabe el acuerdo de 13 años al cual se llegó. La audiencia "confirma la resolución inicial en todos sus pronunciamientos" e impone "las costas derivadas del proceso al apelando", o sea, el CE Mataró.
Gonzalo quiere una entente
Gonzalo, que destaca el hecho de haber ganado la sentencia después de que se lo tildara de mentiroso en la asamblea de socios donde se declaró supuestamente nulo el contrato, explica que quiere llegar a una "entente con la directiva", puesto que él simplemente quiere cobrar el que se le debe de. Recuerda, también, que el contrato a razón de 1.200 euros al mes tenía esta cantidad porque él puso de su bolsillo un dinero por reeixir el proyecto liderado por Pino y Serrano y que este dinero se lostenía que volver en parte. "Sólo espero que aparte de pagar los atrasos, cumplan con el contrato pagando las cuotas el día 10 de cada mes", añade.
Qué pasa con Pino y Serrano?
La duda ahora es saber qué pasa con los ex-coordinadores. Ellos son los firmantes originales del contrato que a posteriori el CE Mataró subrogó. La sentencia indica que son las tres partes las que tienen que pagar, pero hay un problema: los dos coordinadores fueron despedidos de la entidad y ya en la sentencia en primera instancia alertaron que la lógica decía que tenía que pagar quién hace uso de los derechos del club (el CE Mataró) y no que ellos "sólo tengamos obligaciones". No parece que este capítulo se haya cerrado con la sentencia, ni mucho menos.
Renacuajo se ha puesto en contacto con el CE Mataró por sí quiere valorar la sentencia. Si lo hacen se ampliará esta noticia. En declaraciones en Mataró Audiovisual la consideran "muy negativa" a pesar de que lo "aceptan".
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